El pan naan, esa maravilla crujiente por fuera y tierna por dentro, es una receta emblema de la gastronomía de la India, Pakistán, Sri Lanka y Asia del suroeste. No solo es perfecto para absorber cada gota de tus salsas y guisos favoritos, sino que también es una delicia por sí solo.
Por eso hoy te traemos una receta que transformará tu manera de disfrutar del pan. Con estos pasos sencillos, el pan naan no solo será tu nuevo acompañante culinario, sino que también se convertirá en un imprescindible en tu mesa.
Ingredientes:
600 gr de harina común
125 gr de yogur natural
Te podría interesar
350 gr de leche entera
2 cucharaditas de azúcar
2 cucharaditas de sal
4 gr de levadura seca
25 gr de ghee o mantequilla clarificada
Para un toque final dorado y aromático:
2 cucharaditas de ghee o mantequilla clarificada
1 diente de ajo
Un puñado de cilantro fresco
Modo de preparación:
Inicia tu viaje culinario colocando la harina en un bowl grande. Crea un volcán y en su cráter vierte la leche tibia, la levadura y el azúcar, mientras que la sal la colocarás al margen, como un guardián del sabor.
Deja que los ingredientes se conozcan entre sí durante 10 minutos. Luego, añade el ghee y el yogur, y con tus manos, comienza a unirlos en una danza de sabores.
La masa será pegajosa, así que déjala descansar bajo un recipiente para que se humedezca durante 15 minutos, como si estuviera en un spa de masas.
Trabaja la masa con pliegues y déjala reposar otros 15 minutos. Este descanso es clave para que tu pan sea tan esponjoso como las nubes.
Espolvorea un poco de harina y cuando la masa esté suave y uniforme, colócala en un recipiente aceitado y déjala fermentar durante 90 minutos en un rincón cálido de tu cocina.
Después del descanso, amasa un minuto más y divide la masa en ocho porciones iguales. Forma bollitos y déjalos soñar por 30 minutos.
Dale forma a los naan con las yemas de tus dedos, pasándolos de mano en mano, hasta que adquieran la forma de lágrima o triángulo que los hace únicos.
Para cocinarlos, elige entre el horno a máxima potencia por 3 o 4 minutos o una sartén tapada sin aceite a fuego bajo, volteándolos cuando aparezcan burbujas, por 30 a 60 segundos por lado.
Mientras se cocinan, prepara la mezcla para pincelar: en una sartén, fríe el ghee con el ajo picado y luego añade el cilantro. Usa esta mezcla para bañar cada naan con amor y sabor.
Esperamos que esta receta entusiasta te inspire a hornear y a disfrutar de la rica tradición del pan naan, ese bocadillo considerado como una fiesta de texturas y aromas, listo para ser el protagonista de tu próxima comida.