¿Tienes harina, aceite y agua? ¡Entonces estás a punto de convertirte en un maestro churrero! Descubre cómo estos sencillos ingredientes pueden transformar tu cocina en la mejor churrería del barrio.
Se trata de un bocado clásico que nunca falla, ahora en una receta que es pura felicidad para el paladar. Los churros, esa maravilla de la repostería española, han conquistado paladares alrededor del mundo, y hoy te traemos una versión que es tan fácil como deliciosa.
Con solo tres ingredientes básicos, te enseñaremos a preparar churros que son pura perfección: crujientes por fuera, tiernos por dentro, y listos en un abrir y cerrar de ojos.
Ingredientes:
1 taza de agua
Te podría interesar
1 taza de harina
Una pizca de sal
Aceite para freír
Modo de preparación:
1. Para comenzar calienta el agua con sal en una cacerola. Cuando hierva, añade la harina de una vez.
2. Luego, integra bien la harina y cocina hasta que la masa se despegue de las paredes.
3. Posteriormente, vas a dejar que la masa se enfríe un poco y la vas a amasar hasta obtener un bollo suave.
4. A continuación, es momento de darle forma a nuestros churros. Usa una churrera o manga con boquilla estrellada para darles forma.
5. Por último, fríe los churros en aceite caliente hasta que estén doraditos y deliciosos.
No olvides espolvorear azúcar sobre tus churros y acompáñalos con tu bebida caliente favorita. ¡Y voilà! Tienes ante ti una bandeja de churros que hará que cada bocado sea una fiesta en tu boca, por lo que seguramente querrás volver a preparar esta receta.