El polvo de hornear, también conocido como levadura química, es un ingrediente utilizado comúnmente en la cocina para hacer que las masas y los productos horneados como pasteles, galletas y panes suban y adquieran una textura esponjosa. A diferencia de la levadura tradicional, que es un organismo vivo que fermenta la masa, el polvo de hornear es una mezcla de agentes químicos que reaccionan cuando se combinan con líquidos y calor. Hoy te enseñaremos la receta para que lo hagas en casa.
El ingrediente principal en el polvo de hornear suele ser el bicarbonato de sodio, al que se le agrega un ácido, como cremor tártaro o bitartrato de potasio, y un almidón, como maicena, para evitar la formación prematura de la reacción química. Cuando el polvo de hornear se mezcla con los ingredientes secos y luego se combina con los líquidos en la receta, se produce una liberación controlada de dióxido de carbono, lo que provoca que la masa se expanda y suba.
El polvo de hornear es clave en la repostería y la cocina, ya que permite la preparación de productos horneados ligeros y esponjosos sin depender del tiempo de fermentación que requiere la levadura tradicional. Además, no contiene gluten, lo cual lo hace apto para preparaciones que requieran de cualquier tipo de harina.
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Ingredientes
- 25 gramos de bicarbonato
- 50 gramos de cremor tártaro
- 13 gramos de almidón de maíz
Paso a paso
Para hacer esta receta simplemente debemos mezclar los 3 ingredientes y después pasarlos a un frasco hermético para que se conserven bien.
Si necesitas hacer más o menos producto debes agregar otra cantidad de ingredientes, tene en cuenta que sería 1 parte de bicarbonato por 2 partes de cremor tártaro y media parte de almidón.
El cremor tártaro en esta receta activa el bicarbonato porque es un ácido y el almidón evita que la mezcla forme grumos.