La cremona es una de las especialidades más elegidas por los argentinos. Esta variedad de pan, que se encuentra entre los diversos tipos de facturas dulces y saladas, cuenta con varias versiones al momento de llevarla a cabo, por un lado tenemos la preparación clásica y por otro lado la cremona rellena.
Al igual que con muchas preparaciones dulces y saladas, la cremona y la cremona rellena son una creación argentina y es una de las más disfrutadas acompañadas por unos deliciosos mates. Este bocadillo cuenta con una forma de flor o estrella, que destaca por tener un hermoso dorado por fuera, ser crujiente y por dentro es aireado.
En la cuenta de Instagram de "Vane Fernandez" nos podemos encontrar con una receta de cremona rellena con jamón y queso, perfecta para una tarde de mates. La misma lleva pocos ingredientes y sin la necesidad de mucho tiempo, en solo unos pasos puedes terminar la preparación.
Ingredientes
Para la masa:
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1 kg de harina 000
10 grs de levadura seca (si usas fresca son 25 g).
12 grs de sal
20 grs de azúcar
600 ml de agua tibia
1 cucharada de miel
Para el empaste:
120 grs de grasa o margarina (si querés usar manteca son 100 grs)
250 grs de queso (a elección el tipo de queso)
200 grs de jamón
Para pintar:
Partes iguales de huevo y leche
Modo de preparación
En un bowl colocaremos la harina, junto con la levadura, la sal, el azúcar, la miel y el agua. Empezamos a mezclar todo con las manos hasta unir los ingredientes. Formamos una masa y la trabajamos con la mano entre unos cinco y diez minutos, luego la dejamos levar hasta que duplique su tamaño.
Una vez que lo logramos, la desgasificamos y estiramos bien con las manos hasta formar una especie de cuadrado grande. La untamos por completo con grasa por arriba (debe estar a temperatura ambiente). Luego, rellenamos con jamón y queso cortados en cubos, enrollamos la masa y nos quedará una tira larga.
Ahora dividimos la masa en cinco partes y empezamos a estirar con un palo de amasar cada rollo, este procedimiento se debe hacer de ambos lados, vertical y horizontal. Enrollamos nuevamente y dejaremos que repose unos 10 o 15 minutos.
Con el palo de amasar volvemos a estirar solo el centro, es decir, debemos dejar los bordes sin amasar para que queden con un poco de relieve. Doblamos al medio de manera horizontal, juntando los bordes y presionamos. En la parte que quedó más gruesa, haremos varias líneas de cortes de punta a punta, y luego hacemos otros pero de manera vertical para formar las divisiones de la cremona.
Unimos ambas puntas para formarla, colocamos las roscas en una placa para horno y las dejamos ahí hasta que dupliquen su tamaño. Pintamos con una mezcla de huevo y leche para que se doren y cuando se leudaron llevamos nuestra cremona rellena al horno a 200° por unos 15 minutos o hasta que se doren.