Cuando hablamos del árbol Schinus molle, estamos haciendo referencia a aquel que es originario de América del Sur, más precisamente de Perú, y que popularmente se lo conoce como pirul, falso pimentero, gualeguay o aguaribay.
Sin embargo, más allá de los distintos nombres que pueda recibir esta especie, estamos hablando siempre de aquel árbol que era considerado sagrado por los Incas por diversos motivos que vamos a explicar a continuación.
Sucede que este maravilloso ejemplar nativo, el cual puede llegar a medir entre 15 y 20 metros de altura, era muy apreciado por los múltiples usos que brindaba y para dar protección a los chasquis fue plantado a la vera de las rutas que comunicaban con el Imperio Incaico.
Incluso, los Incas solían llamarlo el “árbol de la vida” o “mulli” debido a su fortaleza, la frescura y la belleza que despliega desde su tronco, ramas y flores, pero también por las múltiples propiedades que le confieren.
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Era tan valioso para ellos, que solían acostarse para dormir justo debajo de su copa y de esa manera se dice que se experimentaba un sueño sereno gracias a la exquisita e intensa fragancia que desprenden sus hojas, las cuales ahuyentaban a todo tipo de insectos para que tuvieron un placentero descanso a la sombra.
Principales usos del aguaribay
Este árbol leñoso de hojas perennes y de color verde intenso produce, un mes antes del verano, unos frutos que se cosechan y se dejan secar durante 24 horas para convertirse en la pimienta rosa que se suele aplicar a las comidas por su sabor cítrico y levemente picante.
Además, como ya dijimos, la resina que contienen sus hojas funciona como un potente repelente natural y por ello se suelen frotar las extremidades con sus hojas para que su fuerte aroma mantenga alejados a los mosquitos, las moscas y cualquier otro insecto.
Como si fuera poco, y gracias a su rápido crecimiento, este árbol sagrado es utilizado en plantaciones agrícolas para dar una increíble sombra, como cortina rompevientos y con fines ornamentales como árbol de paseos en zonas de clima cálido.
En definitiva, se trata de un árbol que posee características únicas y de gran valor, motivo por el cual desde la civilización Inca que era considerado sagrado y mágico y eso no ha cambiado en la actualidad, donde siguen siendo un verdadero tesoro de la naturaleza.