Si bien las pastas se asocian a un plato principal, hoy te traemos una novedosa receta de ravioles fritos, los cuales podrían incluirse en una picada sin demasiado problema.
Si tu idea es sorprender a tus comensales con una receta única, la opción de ravioles fritos que te dejamos a continuación de seguro que no pasará desapercibida en tus picadas con amigos o familiares.
Cabe destacar que, diferencia de su preparación tradicional, esta vez los ravioles fritos funcionarán a modo de snack para comer con un simple tenedor o bien con la mano, acompañándolos con algunas salsas para sumar un poco de sabor.
Por otra parte, será necesario que a la hora de elegir el relleno de nuestros ravioles, optemos por ingredientes más relacionados a la picada, como por ejemplo el queso o el jamón.
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Ingredientes
1 caja de ravioles secos (preferentemente 4 quesos)
Aceite para freír
Crema
Orégano
Ají molido
Semillas de sésamo
Sal
Preparación
Para comenzar con esta receta, debemos freír nuestros ravioles en abundante aceite, utilizando una sartén u olla profunda. Para que la fritura salga de manera correcta, deben estar completamente sumergidos en el aceite.
Una vez que vayan tomando un tono dorado, los daremos vuelta ayudándonos con una espumadera para conseguir una cocción pareja. Luego, los retiramos escurriendo bien el exceso de aceite y los colocamos sobre algún papel absorbente.
Mientras esperamos que los ravioles fritos bajen su temperatura (recordemos que en el interior tienen queso fundido), podemos realizar algunas salsas para acompañarlos durante la picada.
Para ello, colocaremos 100 gramos de crema en un recipiente y agregaremos el orégano, las semillas de sésamo y la sal. Revolvemos bien y reservamos, para luego continuar con el mismo procedimiento, cambiando el orégano por el ají molido.
Por último, solo nos quedará servir nuestra receta de ravioles fritos acompañados de las dos salsas y desgatarlos como si fuera un snack. Sin lugar a dudas, una idea novedosa para incluir en tus mejores picadas.