Los bizcochos de grasa son un bocadillo de tamaño pequeño y un sabor tan rico que es de los preferidos tanto por grande como por niños. Lo mejor de esto es que con el paso del tiempo su receta fue cambiando y hoy bastan dos pasos para poder degustarlos.
Sucede que atrás quedaron los extensos procedimientos y la interminable lista de ingredientes, ya que con el secreto de Paulina Cocina podrás elaborar los bizcochos de grasa en casa, con solo dos productos y muy rápidamente. Una receta que seguro te dejará boquiabierto.
Se trata de una versión de los clásicos bizcochos cuyo resultado será tan exquisito que se convertirá en tu procedimiento preferido a la hora de elaborar unos bocadillos para compartir.
Entonces, sin más preámbulos, te dejamos a continuación el paso a paso para que consigas elaborarlos muy fácilmente y sin necesidad de usar levadura. Lo mejor es que esta es una receta tan simple que es apta para principiantes de la cocina.
Te podría interesar
Ingredientes:
200 gr de harina leudante
200 cc de crema de leche
Orégano y queso rallado (opcional)
Modo de preparación:
Tal como lo dijimos al inicio, esta receta es tan fácil de preparar que con solo dos pasos podrás obtener unos deliciosos bizcochos que no podrás parar de comer.
Para comenzar, lo primero que debes hacer es colocar en un bol los ingredientes, junto con una cucharadita de sal, para luego mezclarlos con una cuchara.
En seguida vas a continuar con el amasado durante unos minutos de manera que consigas una masa unida y bien lisa. La vas a colocar en un papel film y la dejarás descansar en la heladera durante media hora.
El siguiente paso consiste en estirar la masa hasta que consigas un grosor de aproximadamente medio centímetro y con un cortante circular vas a darle forma de bizcochos.
Inmediatamente después vas a ubicarlos sobre una placa para horno, los vas a pinchar con un tenedor y en caso de que quieras lucirte con una versión mejorada de estos clásicos bizcochos de grasa, tienes que trabajar sobre su cobertura.
Aquí debes mojar un poco la superficie de los bizcochos para que, ya sea el orégano o el queso rallado, queden perfectamente pegados.
Finalmente, llevarás esta placa a un horno a 180° durante unos 10 minutos aproximadamente o cuando notes que están bien doraditos.
De esta manera, gracias a esta facilísima receta, podrás disfrutar de unos bizcochos de grasa ricos, esponjosos y de sabor inigualable. Una propuesta ideal para disfrutar de un irresistible bocadillo durante el desayuno, la merienda o entre mate y mate.