Las ventajas de cultivar cactus en casa son numerosas, ya que además de ser excelentes purificadores del aire, son ornamentales, poco exigentes con su cuidado y, según el Feng Shui, al ubicarlos en el jardín nos protege de las malas energías.
Teniendo en cuenta esto, deberíamos considerar la inclusión en el exterior de nuestro hogar de un cactus sumamente especial. Hablamos del Pereskia aculeata, uno que se destaca por su gran porte y su increíble belleza.
Se trata de una especie nativa del continente americano y cuya distribución se extiende desde América del Sur y Central, hasta el Caribe, Florida y México. Puede que en estos sitios se conozca a este cactus con el nombre de Pereskia, Guamacho y Ramo de Novia.
Pero la gran popularidad de este cactus trepador se debe principalmente a su tamaño, ya que con sus largos tallos espinosos puede trepar muros, rocas y árboles hasta alcanzar los 10 metros de altura.
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Debido a esto es que en 1979 en Sudáfrica decidieron prohibir su cultivo, puesto que consideraban que se trataba de una especie invasora que podría dañar la vegetación natural y desde entonces su cultivo se limitó a los invernaderos.
Sin embargo, en la actualidad esta planta tiene un gran valor ornamental porque produce unas flores vistosas y perfumadas que embellecen cualquier espacio. Estas puede ser blancas, amarillo pálido y hasta con matices rosados.
En cuanto a sus hojas, debemos decir que son un complemento de todas las cualidades mencionadas anteriormente, debido a que se caracterizan por su forma ovalada y su color verde brillante, pero además llevan sobre el envés pequeños garfios que sirven como anclaje para los nuevos brotes.
Lo cierto es que por todas estas características, a muchos les cuesta creer que se trate verdaderamente de un cactus, pero su rápido crecimiento que transforma muros verdes repletos de flores perfumadas, convierte a la Pereskia aculeata en una especie irresistible.
Uso comestible
Además de su gran porte y atractivo, este cactus es también reconocida como una útil planta comestible, ya que en varias regiones sus brotes y hojas se cocinan y consumen como verduras.
Como si fuera poco, esta especie produce también unas frutas redondeadas de color blanco, amarillo, naranja o rojo que pueden llegar a medir hasta 2 centímetros de diámetro. Lo mejor de estas bayas es su rico sabor, lo que provoca que sean utilizadas comúnmente para la elaboración de guisos, conservas con azúcar o mermeladas.
En conclusión, Pereskia aculeata es un cactus trepador de singulares cualidades, vistoso aspecto y producción comestible tan provechoso que su cultivo en el hogar trae aparejado una gran cantidad de beneficios.