El yogur es uno de los lácteos más versátiles, puede comerse en el desayuno, la merienda, incluso puedes utilizar el clásico que no tiene azucar para añadirlo a tus comidas diarias. El día de hoy te traemos una receta muy practica para que puedas hacer tu propio yogur griego en casa.
El yogur griego se diferencia del común porque se filtra el suero, consiguiendo un resultado mucho mas cremoso y delicioso. Lo mejor de esta receta es que se prepara con tan solo dos ingredientes y requiere de un paso a paso muy fácil, apto para cualquier persona, incluso para aquellos que no son tan habilidosos en la cocina.
Ingredientes
- 125 gr de yogur natural sin azúcar
- 1 litro de leche entera
Modo de preparación
Como te detallamos en los ingredientes, para hacer esta receta se necesita de un yogur, esto es porque se requiere de las bacterias Streptococcus thermophilus y Lactobacillus bulgaricus que suelen ser muy difíciles de conseguir.
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Aclarado esto, comenzamos con el procedimiento. Primero debes colocar toda la leche en una cacerola y llevarla al fuego para calentarla. Esta debe llegar a los 70°C, pero si no tienes un termómetro puedes medirlo introduciendo tu dedo meñique y contando 5 segundos, si al llegar al 5 tienes que sacar el dedo porque ya te quema esta lista. Por el contrario, si no te quemas debes dejarlo más tiempo. En cambio, si puedes tenerlo unos segundos más esta demasiado fría.
En un bowl coloca un poco de la leche caliente y agrega el yogur natural. Mezcla bien ambos ingredientes hasta integrarlos completamente.
Una vez que integraste bien, vuelca esta preparación en la cacerola con el resto de la leche y mezcla un poco más, sin demorarte demasiado tiempo porque no tienes que dejar enfriarla.
Al ser una receta casera no hace falta usar una yogurtera, asique vuelva la preparación en un tupper o recipiente hermético.
Cierra el recipiente inmediatamente para que no se vaya el calor. Luego, envuélvelo con un paño o una toalla para que mantenga más la temperatura.
A continuación, colócalo en un lugar cerrado como el microondas o el horno apagado y déjalo allí toda la noche.
Al día siguiente el yogur ya tendrá consistencia cremosa. Si bien puedes consumirlo así, para conseguir el yogur griego que queremos debes retirarle el suero.
Para retirar el suero debes tomar un colador común, el mismo que usar para los fideos. Colócalo sobre un bowl grande y encima cúbrelo con un paño de algodón limpio. Luego vierte todo el yogur.
Tapa la preparación con el paño que sobra en los bordes y vas a ver que en cuestión de minutos el yogur comienza a perder el suero.
Cuanto más tiempo dejes el yogur escurriendo en la heladera más cremoso y espeso quedará. Así que el tiempo es a gusto de cada uno, si quieres un yogur super cremoso lo dejas toda la noche para que suelte bastante suero, si lo quiere más líquido lo dejas menos horas.
Ahora tienes un delicioso yogur griego para consumir como mas te guste. Puedes comerlo solo, con azúcar, con miel, mermelada o agregarlo a tus ensaladas y postres.
Para conservar el yogur debes guardarlo en un recipiente bien cerrado. Dura entre 6 y 7 días en heladera. Y en caso de que quieras hacer más, solo debes usar tres cucharadas del yogur que hiciste, así no tendrás que comprar otro.
Espero que te haya gustado esta receta y te animes a prepararlo en casa.