En esta época en la que los alimentos ultra procesados y cargados de harinas y azúcares parecen ser las únicas opciones, encontrar un postre saludable puede resultar una tarea desalentadora. Pero no te preocupes, porque hoy te traemos una receta que cambiará por completo esa percepción. Prepárate para deleitar a tu familia con un postre cremoso sin azúcar, sin lácteos, sin harinas y sin granos.
En esta receta, los protagonistas principales son los dátiles y el coco en diversas formas. Estos ingredientes, conocidos por sus cualidades nutritivas y su sabor exquisito, se combinan a la perfección. Los dátiles, con su dulzura natural, aportan el toque perfecto sin necesidad de añadir azúcares refinados. Por otro lado, el coco en sus diferentes presentaciones brinda una textura suave y cremosa en cada bocado.
Si quieres saber más sobre esta increíble receta no puedes perderte ni un solo detalle. Sigue leyendo y descubre cómo preparar este delicioso postre que te permitirá cuidar de tu salud sin renunciar al placer de disfrutar de un bocado dulce y reconfortante.
Ingredientes
- 33 dátiles pequeños
- 4 huevos
- 1 cda abundante de aceite de coco
- 2 tazas de leche de coco
- 1 cda de esencia de vainilla
- 100 gr de coco rallado
- 1 cda de azúcar de coco (opcional)
Para decorar (opcional)
- Canela
- Azúcar de coco
Modo de preparación
El primer paso de la receta es descarozar los dátiles y dejarlos en remojo por 2 o 3 horas. También puedes dejarlo desde la noche anterior.
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Una vez que los dátiles se remojaron el tiempo suficiente, escurre el liquido y si quieres puedes guardarlo para preparar jugos u otra receta ya que es muy dulce y delicioso.
Por otro lado, en el vaso de una licuadora, coloca los huevos, el aceite de coco, la leche de coco, esencia de vainilla, el coco rallado, los dátiles y si te gusta mucho lo dulce, puedes sumar azúcar de coco. Este ultimo ingrediente es opcional ya que los dátiles aportan suficiente dulzor a la preparación.
Licua todo por unos minutos hasta que quede una preparación homogénea y cremosa.
Ahora es momento de preparar el molde. La cocción debe hacerse a baño maría, para esto toma una fuente para horno y adentro coloca el molde que quieras utilizar, aproximadamente de 25 cm de diámetro.
Agrega agua a la fuente en la base y sobre el molde vierte toda la preparación.
Cocina en un horno precalentado a 180°C por 30 o 40 minutos aproximadamente. El postre debe quedar cuajado y húmedo por dentro, puedes pincharlo con un palito o cuchillo y si este sale limpio es porque esta listo.
Retíralo de la fuente y deja que se enfrié. Mientras puedes decorarlo con canela, con azúcar de coco o con una mezcla de ambas. Una vez que se entibie llévalo a la heladera para poder disfrutarlo bien frio.
Espero que te haya gustado esta receta deliciosa y muy saludable. Su textura es similar a la del flan y tiene un sabor dulce que te encantara.