Descubre el auténtico sabor de China con Tang Cu Li Ji, una deliciosa receta de cerdo agridulce que te dejará chupándote los dedos. Este plato tradicional tiene una historia fascinante que se remonta a la antigua cocina de Shandong.
La receta de Tang Cu Li Ji consiste en cortar tiernos trozos de carne de cerdo que son cuidadosamente marinados para realzar su sabor natural. Luego, se recubren con una capa de harina y maicena para freírlos en aceite, lo que otorga como resultado que sean crujientes por fuera y jugosos por dentro.
Pero eso no es todo, la magia de este plato radica en su salsa agridulce. Una mezcla cautivadora de sabores que captura la esencia misma de la gastronomía china. La salsa combina sabores dulces y ácidos. Cuando los trozos de cerdo frito se mezclan con esta irresistible salsa, se crea una explosión de sabores en cada bocado.
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Ingredientes para 4 personas
Para marinar
- 500 gr de lomo de cerdo
- 1 huevo
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1 cucharada de vino de arroz chino (puedes reemplazar con una cucharada de vinagre de vino y una pizca de azúcar)
- 1 pizca de sal
- Pimienta blanca
Para la salsa agridulce
- 1/2 taza de agua
- 3 cucharadas de kétchup
- 2 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de vinagre de arroz (puedes reemplazar con vinagre de vino o vinagre de sidra)
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 pizca de sal
- Maicena disuelta en agua
Para rebozar
- 50 gr de harina de trigo
- 50 gr de maicena
- Semillas de sésamo (para decorar)
- Aceite vegetal para freír
Modo de preparación
Comienza la receta cortando la carne de cerdo en tiras finas y luego colócalas en un bowl.
Ahí mismo añade una generosa cantidad de salsa de soja ligera para realzar el sabor de la carne. Luego, un toque de vino de arroz chino para darle un toque auténtico, aunque si no consigues puedes omitirlo. También incorpora un huevo para obtener una textura jugosa, junto con sal y pimienta blanca al gusto.
Mezcla todos los ingredientes cuidadosamente asegurándote de que cada trozo de carne esté bien cubierto. Tapa el bowl y deja marinar durante al menos 30 minutos.
Para rebozar tienes que hacer una mezcla de harina de trigo y maicena en partes iguales, para que quede mejor te recomiendo que tamices ambos ingredientes.
A continuación, toma cada tira de cerdo marinada y pásala por esta mezcla de manera que quede bien cubierta por todos lados. Asegúrate de que cada trozo esté uniformemente empanado para obtener un resultado perfecto.
El siguiente paso es hacer una doble fritura. En una sartén profunda, calienta abundante aceite vegetal a fuego medio hasta alcanzar aproximadamente los 160°C. Coloca con cuidado las tiras de cerdo empanadas en el aceite caliente. Deja que se cocinen durante unos 4 a 5 minutos. Este primer paso de cocción asegurará que la carne esté tierna y jugosa.
Retira el cerdo frito de la sartén y colócalo en una rejilla o sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Ahora sube el fuego a alrededor de los 190 ºC. Vuelve a sumergir el cerdo empanado en el aceite caliente y freilo hasta que esté perfectamente dorado y crujiente por fuera. Este segundo paso de fritura dará como resultado una textura crujiente que complementa maravillosamente el sabor jugoso del cerdo.
A continuación, debes preparar la salsa estrella de este plato. En una sartén, agrega un chorrito de aceite vegetal y caliéntalo. A continuación, añade el ajo picado finamente y fríelo hasta que desprenda su aroma característico. Luego, agrega agua, vinagre de arroz, kétchup, salsa de soja ligera, azúcar y una pizca de sal. Mezcla todos los ingredientes en la sartén, asegurándote de que se incorporen bien y se forme una deliciosa salsa agridulce.
Para darle consistencia a la salsa, tienes que preparar una mezcla de maicena con agua en un recipiente aparte. Agrega solo unas cucharadas de esta mezcla poco a poco a la sartén, revolviendo constantemente, hasta que la salsa adquiera la consistencia deseada.
A continuación, incorpora las tiras de cerdo frito y mézclalas con la salsa para que se impregnen de su sabor agridulce.
Sirve el cerdo agridulce en un plato y, si deseas añadir un toque adicional de sabor y presentación, espolvorea semillas de sésamo tostado por encima. Puedes disfrutar de esta receta sola o acompañarla con arroz blanco recién cocido para complementar los sabores.