Hoy queremos compartir contigo una receta que te dejará con ganas de probarla al instante. No solo se trata de un postre exquisito, sino también de una verdadera obra de arte culinaria. Los Strawberry Rose son irresistibles al paladar y también son visualmente hermosos, quedan maravillosamente bien en cualquier mesa dulce.
Esta receta combina a la perfección el sabor dulce y refrescante de las frutillas con la cremosidad de una mousse de chocolate y la textura crocante de la masa quebrada, creando una armonía de sabores que deleitará a todos.
Lo mejor es que no necesitas ser un experto en la cocina, porque esta receta es fácil de seguir y requiere ingredientes simples de conseguir. Continúa leyendo para conocer los detalles.
Ingredientes
- Frutillas
- Palos de brochet
Para la masa
- 1 huevo
- 220 gr de harina de trigo
- 110 gr de manteca
- 2 cucharadas de agua fría
- 1 pizca de sal
- 50 gr azúcar glas
Para la mousse de chocolate
- 160 gr de chocolate en amargo
- 50 gr de manteca sin sal
- 2 huevos
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 pizca de sal
Modo de preparación
El primer paso de la receta es hacer la masa quebrada. Para eso debes colocar la harina, el azúcar y la sal en un recipiente de una batidora.
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Después agrega la manteca fría cortada en dados y mezcla con las varillas de pala o gancho de la batidora, mezcla en velocidad baja para que la manteca quede cubierta de harina y después con la yema de los dedos, desmenúzala para formar una arenado.
Seguidamente añade el huevo y también con las manos o con una máquina amasadora mezcla hasta integrarlo. Por último, agrega el agua. No pongas toda el agua, reserva un poquito para añadir luego en caso de que sea necesario.
Ya con todos los ingredientes integrados, comienza a dar una consistencia más uniforme a la masa, para eso debes ir aplastando la mezcla con la palma de la mano y doblándola sobre sí misma una y otra vez hasta integrarlo todo y formar una masa bien unida.
Al principio puede resultar algo pegajoso y parece que los ingredientes secos no terminan de integrarse, pero poco a poco todo irá tomando forma gracias al calor que aportaremos con las manos. Si es necesario puedes ir añadiendo el resto del agua, siempre poco a poco, hasta conseguir que la masa se mantenga ligada y que no se pegue a las manos.
Para terminar con la masa, dale forma de bollo y aplana ligeramente con las manos. Luego envuélvela en films para evitar que se seque y guárdala en la heladera por una hora.
Mientras tanto, prepara la mousse de chocolate. Primero debes fundir el chocolate junto con la manteca a baño maría o en el microondas. Una vez que comienzan a derretirse mezcla para integrar ambos ingredientes y retira del fuego.
A continuación, separa la clara de la yema de los dos huevos que te indicamos en los ingredientes y añade las yemas al bowl con el chocolate fundido. Mezcla todo con un batidor de mano para unificar y deja que se enfrié.
El siguiente paso es poner las claras en un bowl con una pizca de sal y batirlas un poco hasta que queden espumosas. Agrega el azúcar y continua el batido hasta que se forme una especie de merengue bien resistente. Debes dar vuelta el bowl y la crema no debe caerse.
Cuando esté fría la mezcla de chocolate, ve echándola en varias tandas al bol con las claras montadas, y mezcla todo poco a poco con una espátula realizando movimientos envolventes para no perder la esponjosidad.
Una vez que lo integras ya tendrás la mousse lista para usar. Ahora solo queda armar este delicioso postre.
Primero tienes que dividir la masa en porciones pequeñas y cocinarlas en moldes de cupcakes para que tomen forma de canastitas.
Cocínalas en un horno precalentado a 180°C por mas o menos 20 minutos o hasta que estén doradas. Luego retíralas y llénalas con la mousse de chocolate.
El siguiente paso es tomar las frutillas mas maduras y que tengan un tamaño similar, límpialas y sécalas bien y colocalas en posición vertical con la parte verde hacia abajo.
Luego, con un cuchillo bien afilado, realiza una serie de cortes en sentido longitudinal desde la parte superior hasta la base. Los cortes deben ser superficiales y no llegar hasta el final de la frutilla.
A medida que realices los cortes, notarás que las rodajas se abren y se despliegan, dándole forma de pétalos a la frutilla. Continúa haciendo cortes alrededor de toda la fruta para formar la rosa.
Repite este proceso con todas las frutillas que desees convertir en rosas. Por último, pínchalas con un palito de brochet desde un extremo y al otro introdúcelo en la mousse.
Para terminar la receta deja enfriar y ya tienes listo un delicioso y original postre en el que combinan dos sabores increíbles como son la frutilla y el chocolate.