El hígado a la veneciana es una receta tradicional de la cocina italiana, que consiste en hígado de ternera cortado en tiras y cocido con cebolla y vinagre. Esta preparación es muy popular en Venecia, de donde proviene su nombre. Además de ser deliciosa, es una receta muy económica y súper nutritiva.
Esta receta idealmente debe prepararse con hígado de ternera. Este alimento es una excelente fuente de hierro, proteínas y vitaminas del complejo B, nutrientes esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. El hierro es necesario para la formación de glóbulos rojos, mientras que las proteínas son fundamentales para el desarrollo y mantenimiento de los músculos y los huesos. Las vitaminas del complejo B son necesarias para el metabolismo energético y el buen funcionamiento del sistema nervioso.
Por lo tanto, el hígado a la veneciana es una excelente opción para incluir en una dieta equilibrada y saludable. Además, te compartiremos el paso a paso para que lo acompañes con un delicioso maíz frito.
Ingredientes
- Cebollas 3
- Hígado 400 gr
- Perejil
- Salvia
- Aceto balsámico 100 cc
- Sal
- Vino blanco 50 cc
Polenta
- Harina de maíz blanca 300 gr
- Agua 900 cc
- Manteca 100 gr
Modo de preparación
El primer paso de la receta es preparar la polenta. Las proporciones para esta preparación siempre es 3 partes de agua por una de agua o el liquido que elijas.
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En este caso utilizaremos agua. Debes ponerla a hervir y una vez que rompe hervor agrega la harina de maíz. Debes cocinar por unos 6 minutos aproximadamente. Al principio debes batir con batidor de alambre para que no se formen grumos y una vez que espesa mezcla con una espátula.
Baja el fuego de la polenta y sin descuidarla, es decir batiendo cada tanto, comienza a preparar la veneciana. Esta preparación siempre comienza cocinando la cebolla en una sartén con un poco de aceite. La cebolla debe estar cortada en pluma.
Ahora debes preparar el hígado. Primero tienes que sacarle la tela que tiene pegada de ambos lados. El procedimiento es muy fácil, solo debes tirar con los dedos, aunque si está muy pegada puedes ayudarte con un cuchillo.
Después debes proporcionar el hígado, primero cortándolo en bifes y después en tiras del tamaño de un dedo.
Una vez que la cebolla tome un color dorado, hace espacio en el centro y agrega el hígado que debe estar en contacto con el fondo de la sartén para que se selle bien.
Mientras dejas que el hígado se selle, retira la polenta del fuego, agrega 100 gr de manteca, para darle mucha más cremosidad y mezcla bien para integrar.
Este paso paso no es para nada complicado, pero recuerda que estamos haciendo dos preparaciones a la vez, asique mientras preparas la manteca también chequea que el hígado no se queme, si es necesario mézclalo un poco.
Cuando la manteca ya este integrada a la polenta, pásala a una placa enmantecada, aplástala bien y llévala a la heladera para que se enfrié.
En este momento ya puedes comenzar a saborizar el hígado, agrega unas hojas de perejil fresco, unas hojas de salvia fresca, unas gotas de aceto balsámico y por último sal. Mezcla bien, cocina por unos dos minutos mas y apaga el fuego.
Cuando la polenta ya este fría, puedes retirarla de la heladera, desmoldarla y cortarla en bastones de tamaño mediano.
Fríe los bastones de polenta en aceite bien caliente. Tienen que quedar bien dorados, crujiente por fuera y húmedos por dentro.
De esta manera ya tienes terminada la receta. El ultimo paso es servir el hígado, acompañado del delicioso maíz frito. Espero que te animes a probar esta fantástica comida italiana y la compartas en familia.