La cremona junto con los bizcochos y las facturas son los platillos más elegidos para disfrutar a la hora del mate, pues son platillos que van perfectos con el mate y que destacan por estar repletos de sabor.
La cremona es un bocadillo hojaldrado que siempre disfrutamos con amigos o familiares y unos buenos mates, generalmente para disfrutar de este platillo debemos comprarlo en la panadería pero puede pasarnos que no consigamos, por eso una gran opción es tener su receta a nuestro alcance.
No es una preparación muy compleja pero la misma lleva varios pasos, por lo que necesitarás paciencia y tiempo para disfrutarla, pero sin dudas vale la pena la espera. A continuación te dejamos los ingredientes que necesitas junto con el paso a paso que debes seguir para disfrutarla.
Ingredientes
15 grs de levadura fresca
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1 cda de azúcar
1 cda de harina 000
Agua
500 grs de harina 000
1 cda de sal
300 ml de agua
100 grs de manteca pomada
Modo de preparación
En un recipiente pondremos la levadura fresca y a la misma le vamos a añadir la cucharada de azúcar junto con la cucharada de harina, a esto le vamos a incorporar agua y mezclamos muy bien hasta disolver la levadura, la cual taparemos y dejamos reposar 15 minutos.
En la mesada colocamos la harina y haremos una corona, en los bordes de la misma vamos a añadir la sal, mientras que en el centro colocamos la levadura junto con el agua. Mezclamos con las manos el agua y la levadura y de a poco comenzamos a integrar la harina de los bordes.
Amasamos unos 10 minutos, colocamos la masa en un recipiente, la tapamos y dejamos reposar durante 30 minutos. Estiramos la masa de forma rectangular y le damos unos 3 mm de espesor. En el centro de la masa colocamos la manteca pomada en forma rectangular.
Cubrimos la manteca con la mitad de la masa, y llevamos el otro extremos sobre esa masa, volvemos a estirar en forma rectangular y con 3 mm de espesor, llevamos un extremo hacia el centro de la masa, el otro extremos también lo llevamos hacia el centro y llevamos la media mitad sobre la otra.
Guardamos en la heladera unos 40 minutos envuelto en papel fil, transcurrido ese tiempo volvemos a estirar la masa en forma rectangular dejando la abertura del lado derecho y estirándola en forma vertical, debe quedar con 3 mm de espesor. Llevamos un extremo hacia la mitad de la masa, el otro extremos también lo llevamos al centro de la masa y subimos un extremo sobre el otro.
Envolvemos nuevamente con papel film y la llevamos a la heladera por 40 minutos. Transcurrido ese tiempo estiramos la masa de 1 cm de espesor, debemos estirarla con los pliegues hacia el frente de forma vertical. Cortamos todos los bordes sin arrastrar el cuchillo.
Doblamos la masa a la mitad y con la parte sin filo del cuchillo marcamos la mitad de la masa. Hacemos cortes en los bordes con un ancho de 2 cm hasta la marca que hicimos previamente. Unimos ambos extremos formando la cremona y la unimos, colocamos en una placa para horno, tapamos y dejamos reposar 1 hora, hasta que duplique su volumen.
Para finalizar esta receta simplemente debemos cocinar nuestra cremona en el horno precalentado a 200° por unos 20 minutos, veremos que queda crocante por el exterior y suave en su interior.