Con esta receta podrás preparar un plato innovador para satisfacer tu paladar y cuidar tu bienestar. El repollo blanco, el ingrediente estrella de esta preparación, no solo es conocido por su versatilidad culinaria, sino también por sus numerosas propiedades nutritivas.
Esta col es rica en vitaminas, minerales y antioxidantes que benefician nuestra salud. Su textura y sabor suaves, junto con su capacidad para absorber sabores, lo convierten en la elección perfecta para crear esta receta.
Lo mejor de estas de hamburguesas es que no contienen harina, por lo cual son perfectas para aquellos que no pueden o no quieren consumir gluten. Además, son increíblemente fáciles de preparar, ya que requieren solo cinco ingredientes básicos. Sigue leyendo para conocer como repararlas y resuelve tu almuerzo en cuestión de minutos.
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Ingredientes
- 500 gr de repollo blanco
- 1/2 cebolla
- 3 huevos
- Sal, comino molido y orégano
- Pan rallado para rebozar
Modo de preparación
El primer paso de la receta es rallar finamente todo el repollo y agregar un poco de sal para que comience a largos su contenido líquido y se ablande.
Pasa todo el repollo rallado a un recipiente y déjalo en reposo entre 15 y 20 minutos.
Por otro lado, pica la cebolla bien fina y saltéala en una sartén a fuego medio-bajo con un poco de aceite hasta que quede dorada.
Luego de que el repollo haya descansado por algunos minutos, vas a ver como desprendió el agua y esta mucho más blando. Para poder utilizarlo en esta receta tienes que escurrirlo bien, haciendo presión con tus manos, asegurándote de que quede bien seco.
Después de escurrir bien el repollo tienes que sumarle la cebolla dorada que el dará un sabor muy rico. También debes agregar comino y orégano al gusto.
El siguiente paso es añadir los huevos y mezclar bien hasta formar una preparación homogénea con la que puedas formar pequeñas bolitas y luego aplastarlas para darle forma de hamburguesas.
A continuación, debes pasarlas por pan rallado y antes de hornearlos te recomiendo que los enfríes entre 15 y 30 minutos para que se compacten.
Fríelas en aceite caliente por ambos lados y cuando estén bien doradas retíralas, escurre el exceso de grasa y sirvelas.
Puedes preparar esta receta para la picada, acompañada con dips o salsas para la picada o en el almuerzo con una ensalada.