Las fucsias, conocidas popularmente como aljabas, pendientes de la reina, coralitos o bailarina, son pequeños arbustos con flores que pueden plantarse tanto en suelo como en maceta y embellecen y decoran cualquier rincón del jardín.
Es una planta que florece en primavera-verano. Con los cuidados indicados puedes mantener a las fucsias fuertes y sanas durante todo el año. Antes de contarte como mantener sus flores adecuadamente, hablaremos de sus características.
Características de la fucsia
Esta planta puede alcanzar los 2 metros de altura, es recomendable colocar tutores porque sus ramas son muy frágiles. Sus flores se desarrollan en las axilas de las hojas y tienen la particularidad de ser pendientes, la forma se asemeja a la de una bailarina.
Las flores están formadas por cuatro sépalos y una corola de cuatro pétalos muy coloridos. Generalmente se encuentran en color fucsia, pero también las hay en blanco, rojo, morado, amarillas y naranjas.
Te podría interesar
Existen muchísimas variedades de aljabas, pero en Argentina solo se podemos encontrar dos representantes nativas. Una es la Fucsia boliviana, se ubica en el noroeste argentino y sur de Bolivia. La otra es la Fucsia magellanica, que se desarrolla en los bosques subantárticos de Chile y la Argentina.
Cuidados principales
Lo primero que debes tener en cuenta para matener en ben estado las flores de tu planta es la iluminación, lo mejor es cultivarlas en sombra o media sombra, puede recibir sol directo, pero solo unas horas.
Por otro lado, la temperatura debe ser templada. Es importante que las protejas de las heladas en invierno. Lo bueno de tenerlas en maceta es que puedes moverlas siempre que necesites, tanto para cuidarlas del sol como del frio.
En cuento al riego, debes mantener un sustrato húmedo, pero sin encharcar. Para eso es importante que la maceta tenga buen drenaje o que el suelo sea rico en materia orgánica y que drene de buena manera.
Para mantenerla en buenas condiciones y asegurarte de que la floración se de positivamente, tienes que podar la planta anualmente y, en caso de necesitar trasplantarla, asegúrate de que la maceta no sea demasiado grande para que se desarrolle en tallo y no en raíces.
Por último debes controlar que las flores y hojas no sean atacadas por cochinillas o pulgones, si esto sucede tendrás que controlar con insecticidas aptos para este tipo de plantas.