El 1 de agosto no solo fue un día de fiesta para los fans de Spider-Man, sino también el puntapié inicial de una nueva etapa para el trepamuros más querido del cine. Marvel Studios y Sony dieron comienzo al rodaje de Spider-Man: Brand New Day, la cuarta entrega protagonizada por Tom Holland, que promete un giro de estilo con sabor clásico y sorpresas colosales en el reparto.
El teaser que acompañó el anuncio dejó a todos hablando: Peter Parker vuelve a lo básico. El traje revelado en el adelanto abandona la estética futurista de películas anteriores para abrazar un diseño más artesanal y vibrante, con costuras más marcadas y colores intensos que recuerdan al emblemático Spider-Man de Tobey Maguire. Sin gadgets ni tecnología avanzada, esta nueva versión del héroe se alinea con el cierre de No Way Home, donde vimos a Peter cosiendo su propio uniforme, listo para patrullar por las calles de Nueva York.
Además, Brand New Day llevará a Holland a una narrativa más callejera y urbana, algo que el UCM aún no había explorado en profundidad con este actor. El tono parece cambiar, y los rumores sugieren una historia más cruda y visceral donde el vecindario recobra protagonismo.
Pero el gran golpe de efecto vino por parte de The Hollywood Reporter, que confirmó el regreso de Mark Ruffalo como Hulk en esta nueva entrega. Aunque no se sabe si formará equipo con Spidey, la posibilidad de verlo junto a The Punisher (Jon Bernthal, ya confirmado) genera una expectativa electrizante. Como si fuera poco, Michael Mando también vuelve para encarnar al temido Scorpion, quien ya asomó brevemente en Spider-Man: Homecoming.
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Con estreno previsto para el 31 de julio de 2026, Brand New Day se perfila como un regreso a las raíces del personaje con un toque explosivo que puede redefinir su lugar dentro del UCM. Y sí, Spider-Man está más vivo que nunca.