Conocidos en Turquía como “lokma”, estos pequeños tesoros son una verdadera obra maestra culinaria. Imagina morder un buñuelo dorado y crujiente por fuera, para luego sumergirte en su corazón esponjoso y tierno, todo bañado en un almíbar fragante que te llevará al éxtasis del sabor.
Hoy es tu día de suerte, porque vamos a sumergirnos en el arte de hacer buñuelos turcos en almíbar. Te llevaremos de la mano desde el amasado hasta el baño final en almíbar, asegurándonos de que cada paso de la receta sea claro y sencillo para que puedas recrear esta delicia en tu cocina.
Ingredientes:
Para el almíbar:
Te podría interesar
- 250 gr de azúcar
- 220 ml de agua
- Jugo de 1/4 de limón
- 2 semillas de cardamomo (opcional para un toque exótico)
- Cáscara de 1 limón
Para la masa:
- 260 gr de harina común
- 250 ml de agua
- 3 gr de levadura seca o 9 gr de levadura fresca
- 1 cucharadita de azúcar
- 1/2 cucharadita de polvo de hornear
- 1/4 cucharadita de sal
- Aceite de girasol para freír
Modo de preparación:
1. El almíbar: Combina agua, azúcar, jugo y piel de limón, y las semillas de cardamomo en una cacerola. Hierve y cocina por 10-12 minutos hasta obtener un almíbar dorado y perfumado.
2. La masa: Activa la levadura en agua con azúcar, espera a que burbujee, y luego añade la harina, sal y polvo de hornear. Mezcla hasta obtener una masa lisa y deja que repose hasta que doble su tamaño.
3. Fritura mágica: Calienta el aceite y forma los buñuelos con ayuda de una cucharita. Fríelos hasta que estén dorados y luego báñalos en el almíbar celestial.
4. El toque final: Deja que los buñuelos se empapen en el almíbar por 40 segundos para una dulzura perfecta.
Ahora tienes buñuelos turcos listos para ser la estrella de cualquier tarde o como el gran final de una comida especial.