Este cactus conocido como Mammillaria bocasana originario de San Luis Potosí, México es apreciado por su resistencia y espectacular apariencia. Con el tiempo, su cultivo se ha extendido por todo el mundo gracias a su notable atractivo ornamental gracias a sus flores y la versatilidad de sus cuidados.
El verdadero encanto de este cactus radica en sus flores vibrantes. Durante la primavera y el verano, presenta flores en forma de embudo que miden hasta 17 mm de largo y 12 mm de diámetro. Los pétalos externos tienen una base de color verde, mientras que el resto de la flor se tiñe de delicados matices rosados o amarillos, creando una combinación visualmente deslumbrante.
El Mammillaria bocasana tiene un cuerpo globular, con un color verde azulado que lo hace destacar. Sus espinas sedosas, de tonos amarillos y marrones, añaden un toque de delicadeza. Las espinas radiales, formadas por pelos blancos y sedosos, pueden medir hasta 2 centímetros de largo.
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Con el tiempo, estas flores se transforman en frutos cilíndricos y alargados de tonalidad rosa, que se lucen tanto al sol como en semisombra. ¡Un verdadero tesoro visual para cualquier jardín!
Cuidados básicos
El Mammillaria bocasana es perfecto para principiantes, gracias a su facilidad de cuidado. Aquí te dejamos algunos consejos esenciales:
Sustrato: Cultiva tu cactus en un sustrato universal mezclado con un 15% de arena gruesa para facilitar el drenaje. Esto evitará el encharcamiento y mantendrá las raíces saludables.
Riego: Aplica riegos moderados, dejando que el sustrato se seque completamente entre cada riego. Evita mojar el cuerpo del cactus para prevenir enfermedades.
Con estos cuidados básicos, tu Mammillaria bocasana se mantendrá sano, fuerte y libre de plagas y enfermedades, exhibiendo siempre sus espectaculares flores. ¡Un verdadero tesoro de la naturaleza que merece un lugar especial en tu colección!