La popularidad de las huertas urbanas crece de la mano con la idea de reciclaje y cuidados del medioambiente. Y gracias a esta simple y eficaz técnica para cultivar zanahorias en botellas de plástico podrás realizar ambas tareas al mismo tiempo.
Una de las recomendaciones a tener en cuenta a la hora del reciclaje es no arrojar los envases de plástico a la basura, ya que se evitará que se acumulen en basurales y no sean incendiados, causando estragos en el medio ambiente. Tienen un sinfín de nuevas utilizaciones y la idea de una huerta urbana de zanahorias es una de las más aconsejables.
Cómo cultivar zanahorias en botellas
Se trata de un procedimiento que conlleva varios pasos, pero son todos muy simples. En primer lugar se le remueve las etiquetas a todas las botellas que se reciclarán y se cortan justo por el medio.
Con las zanahorias ocurre lo mismo, se recortan unos centímetros por debajo de su tallo, utilizando lo restante para consumir en el hogar. En los costados se le colocan tres palillos para lograr que quede “flotando” sobre la base de la botella cortada; y se repite este mismo proceso con cada una de las zanahorias y medias botellas.
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Se coloca agua hasta que la parte inferior del tallo quede sumergido, evitando rebalsar la mitad de la botella. Apenas a los 5 días ya se verá un notorio crecimiento, con ramificación en el tallo y pequeñas raíces en la zona sumergida en agua.
Por otra parte se utilizarán nuevas botellas de plástico, pero en esta ocasión se le realizarán pequeños agujeros a lo largo y ancho del envase. Esto se busca para lograr un efecto drenaje en la plantación.
En un amplio recipiente, o bien puede ser un cesto de basura, se recubre con una bolsa, se rellena con tierra y un buen sustrato y en un costado se coloca la botella con los pequeños agujeros.
Luego, en el centro, se realiza un pequeño espacio en donde se plantará el tallo de la zanahoria con sus pequeñas raíces y ramificaciones.
La particular forma de regar esta maceta improvisada es colocando agua en la botella con los pequeños orificios, de esta forma su contenido se irá esparciendo de forma gradual y según lo necesite la plantación.
Transcurrido un mes y medio la plantación ya estará lista para ser cosechada, obteniendo nuevas zanahorias para consumir en un sinfín de recetas y preparaciones para la familia.
Las huertas urbanas emergen como una de las principales alternativas para colaborar con el reciclaje y el medio ambiente. En este caso se pueden obtener zanahorias con un simple, efectivo y sustentable procedimiento para realizar en el jardín del hogar como una actividad familiar.