Si estás buscando un postre rápido, delicioso y sin complicaciones, hoy tenemos la receta perfecta para ti. Con tan solo 10 minutos de dedicación, podrás disfrutar de un exquisito postre de leche con maní y chocolate que en mi punto de vista, es un deleite al paladar.
Lo mejor de todo es que esta receta láctea no contiene gelatina ni huevos, pero el resultado es absolutamente increíble. La textura es súper cremosa y se deshace en la boca.
Pero eso no es todo, la verdadera estrella de esta receta es la espectacular cobertura de maní con chocolate que lo convierte en una verdadera delicia. El contraste entre lo suave de la crema de leche y la textura crujiente de los maníes sumergidos en chocolate es simplemente irresistible.
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Estos bocaditos son tan sencillos de preparar que no fallarás en ningún momento. Es perfecto para compartir en familia o sorprender a tus amigos con un toque de dulzura en cualquier ocasión.
Ingredientes
- 750 ml de leche
- 75 gr de harina
- 100 gr de azúcar
- 25 de almidón de maíz o maicena
- 30 gr de manteca
Para la cobertura
- 150 gr de maní triturado
- 50 ml de crema de leche con 33% de grasa
- 50 gr de chocolate
- Hojas de menta (opcional)
Modo de preparación
En una cacerola coloca la leche, la harina, el almidón de maíz y la azúcar. Con un batidor de mano bate todos los ingredientes hasta que se disuelvan en la leche.
El siguiente paso de esta receta es poner la cacerola en el fuego. Debes cocinar a fuego medio, sin dejar de batir hasta que espese y se forme una crema. Aproximadamente tarda 5 minutos.
Una vez que empieza a burbujear, retira la crema del fuego, agrega la manteca y continúa batiendo para integrarla a la preparación.
Vierte la preparación en 3 o 4 vasos de vidrio de 250 ml. Si son de otro material tendrás que engrasarlos con manteca previamente desmoldarlos.
Dale unos golpecitos a los vasos para que no quede aire en el medio de la preparación y lleva a la heladera hasta que se enfríen.
Una vez fríos, desmolda. Simplemente tienes que dar vuelta los vasos y moverlos para que el postre caiga. Si están muy sujetos puedes ayudarte con una espátula.
A continuación, debes cortarlos en rodajas de 2 centímetros aproximadamente para que queden en porciones individuales.
El siguiente paso es cubrir los bordes de los bocaditos con maní triturado y a medida que los vayas terminando colócalos en el plato de presentación.
Por último, debes hacer una ganache. Para eso coloca el chocolate y la crema en un recipiente apto para calor y derrite ambos ingredientes en microondas o baño maría hasta
Mezcla bien el chocolate y la crema hasta que se integren y se forme la ganache.
Decora cada bocadito con una cucharada de ganache de chocolate y un poco más de maní triturado por encima.
Para terminar con la receta puedes decorar con una hojita de menta y ya tienes un postre sencillo y delicioso para compartir.