El boj o Buxus sempervirens, es una planta arbustiva ideal para decorar los cercos del hogar. Esto se debe a que se trata de una especie de hoja perenne, lo que le permite lucir fuerte y bonita durante todo el año. Pertenece a la familia Buxaceae y es originaria de Europa, norte de África y oeste de Asia.
Se trata de una planta muy utilizada en la jardinería, ya que se puede podar y crear formas regulares o más artísticas o esculturales. Sin embargo, también es perfecta para cultivar en maceta, pues se adapta bien a la mayoría de suelos y, como hemos mencionado, luce con hojas verdes todas las temporadas.
Con respecto a sus características, debemos mencionar que es un arbusto que suele crecer en suelos semisecos, que presenta ramas rígidas y que crecen de manera numerosa, así como hojas verdes y coriáceas.
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Posee frutos de un tamaño similar al de los garbanzos, y que suelen presentarse en forma redondeada y con tres picos característicos en uno de sus lados.
Se trata de una planta de crecimiento muy lento, lo que hace que su reproducción suela realizarse más a partir del uso de esquejes que a partir de sus semillas.
Los cuidados del boj
Sustrato: hay que tener en cuenta que se trata de una especie que prefiere los suelos con un pH neutro o suelos calizos. Sin embargo, se adapta bien a la mayoría de terrenos, incluso terrenos pobres.
Temperatura: esta planta soporta bien las temperaturas frescas y cálidas. No obstante, la mejor temperatura será la que se sitúe en torno a uno 10 ºC aproximadamente.
Luz y ubicación: prefiere la luz indirecta, por lo que en verano se recomienda colocar el boj en un lugar con semisombra. Con respecto a su ubicación, si está en maceta es bueno que le dé la luz natural. También suelen usarse de forma muy decorativa para la entrada de la casa, colocándose uno a cada lado de la puerta o del principio del camino.
Plagas: en cuanto a las plagas puede ser susceptible al mosquito del boj, cochinillas, meleta, nematodos y arañuela.
Riego: se debe adecuar muy bien a las estaciones del año. En temporadas de calor será importante regar la tierra antes de que esta se seque por completo.
Lo más recomendable será regar la planta cuando la superficie de la tierra empieza a secarse, pero no el interior. En tanto, en los meses de invierno y otoño, lo mejor es limitar el riego a una vez a la semana.