Hay objetos decorativos que nos transportan a lugares mágicos y nos permiten crear espacios únicos y personales. Es por eso que, en el día de hoy, queremos presentarte una idea de decoración encantadora, que no solo te generará estos sentimientos, sino que también despertará tu espíritu creativo y te brindará momentos de relajación.
Se trata de unos colibríes de papel higiénico, toallas húmedas y cartón. Estas pequeñas aves poseen una belleza indescriptible que ha cautivado a muchas personas a lo largo de la historia. Ahora, gracias a la creatividad y destreza de los amantes de las manualidades y la decoración, podemos llevar esa belleza a nuestros hogares de una forma única.
Esta propuesta de decoración no solo es estéticamente hermosa, sino que también te permitirá desplegar tus habilidades creativas y dar rienda suelta a tu imaginación. A continuación, te daremos un paso a paso detallado para que puedas crear tus propios colibríes en casa.
Colibríes decorativos
Como te indicamos al principio, para hacer esta pieza de decoración vas a necesitar papel higiénico, toallas humedad y cartón.
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Para hacer la cabeza vas a necesitar 3 secciones de papel. Tienes que humedecerlo, compactarlo y darle forma de bola.
El cuerpo debes realizar con 18 secciones de papel. Tienes que enrollarlos un poco, humedecerlos y darle una forma ligeramente curva.
No olvides escurrir muy bien el papel para que no quede exceso de agua y de esta manera poder compactar bien tanto la cabeza como el cuerpo.
Una vez que tienes las dos partes, deja secar completamente y luego, con una toalla húmeda envuélvelas. Para hacerlo primero busca el centro de la toalla, allí coloca la cabeza y luego el cuerpo.
Con un hilo o una cuerda muy fina, comienza amarrar desde la cabeza hasta el final del cuerpo, para que la toalla húmeda quede bien sujeta.
Al finalizar haz un nudo para que quede bien seguro y corta el exceso en forma de flecha.
Con un palillo fino, realiza un agujero en la cabeza para poner el pico. Corta ese mismo palillo del largo que quieras que sea el pico y con pegamento instantáneo sujétalo al agujero.
El siguiente paso es hacer los moldes de las alas y la cola. En una hoja cuadriculada dibuja un rectángulo de 14x8 cuadritos. Divídelo por la mitad y traza líneas suaves.
En el rectángulo tienes que dibujar una forma similar a un abanico para hacer el molde de la cola. Te dejo una imagen de referencia.
Para las alas realiza un rectángulo de 15x9 cuadritos y e el interior dibuja cuatro puntos igual que como se ve en la siguiente imagen.
Para formar las alas tienes que unir los puntos y luego agregar una pequeña pestaña para poder pegarlas al colibrí.
Ahora debes copiar los moldes en una cartulina o un papel grueso. No olvides de realizar las dos alas.
Al molde de la cola debes dividirlo a la mitad, por lo largo. A esas mitades tienes que dividirlas a la mitad y nuevamente a la mitad. Después debes darle una terminación redondeada. Esto servirá para diseñar las plumas de la cola.
En las alas también debes dibujar unas alitas, puedes hacerlas como más te gusten.
Con una tijera corta los moldes por el contorno, respetando las partes redondeadas que dibujaste.
Cuando tengas la cola y las alas listas, debes pegarlas al colibrí. En cuanto a la cola, puedes dividir en dos partes el resto de toalla húmeda que quedo y pegar el papel en la mitad con pegamento instantáneo.
Luego, divide el cuerpo del colibrí a la mitad imaginariamente, a la mitad de arriba también divídela en dos y en el centro de esa mitad es donde van las alas. Pega solo la parte de la pestaña que añadiste y asegúrate que queden bien levantadas, como si estuviese volando.
Cuando tengas el cuerpo listo debes cubrir la cuerda que esta a la vista y asegurar aun mejor las alas, la cola y el pico. Para eso necesitas un paño húmedo. A este debes cortarlo en tiras de un centímetro aproximadamente, por la parte elástica.
Para saber cual es la parte más elástica, simplemente tira de los extremos y te darás cuenta que un lado es más flexible que el otro.
Comienza cubriendo la cabeza y luego baja hasta terminar el cuerpo. Es un procedimiento sencillo pero que requiere paciencia. Debes colocar las cintas como si estuvieses haciendo una momia.
Para las patas tienes que utilizar 2 alfileres. Con ayuda de una pinza tienes que doblarle un extremo para que quede como un espiral. Luego clávalos en la base del colibrí y asegúralas con pegamento.
El ultimo paso es darle color al colibrí. Para pintarlo, hazlo con pequeños golpecitos para que las toallas no absorban toda la pintura. Te recomendamos que busques una imagen de referencia para saber como combinar los colores.
Pinta los ojos negros y agrega un punto blanco para darle brillo.
De esta manera ya queda terminado, pero si quieres agregar mas brillo, puedes usar purpurinas de diferentes colores. Para añadirla utiliza el clásico pegamento escolar a base de agua.
Una vez que se seca la pintura y los brillos, puedes colocar esta pieza de decoración en cualquier rincón de tu casa para aportar vida y color.