Si eres amante de la pastelería internacional y buscas una receta que te transporte a los rincones más deliciosos de Europa del Este, no puedes perderte la exquisita babka de chocolate.
Este dulce tradicional, con una miga esponjosa, blandita y jugosa, rellena de un irresistible chocolate, se convertirá en el protagonista indiscutible de tus meriendas de invierno. Es una receta ideal para acompañar con una taza de té o café caliente.
Antes de pasar a los detalles debes saber que la preparación de la babka de chocolate requiere tiempo y paciencia. Al igual que otros panes de estilo similar, su elaboración es todo un arte que demanda dedicación para obtener un resultado perfecto. Pero no te preocupes, con esta receta paso a paso, podrás deleitarte con una babka casera que te hará sentir como un auténtico chef.
Ingredientes
Prefermento
- 65 gr de harina de trigo
- 125 ml de leche
- 15 gr de levadura fresca o 5 gr de levadura seca
Masa
- 2 huevos
- 1 ralladura de naranja
- ½ cdta de esencia de vainilla
- 50 gr de azúcar
- 325 gr de harina de trigo
- 1 cdta de sal
- 100 gr de manteca sin sal
Relleno
- 85 gr de manteca sin sal
- 85 gr de chocolate
- 45 gr de azúcar glass
- 2 cdas de cacao en polvo
- 1 pizca de sal
Sirope para la cobertura
- 2 cdas de agua
- 2 cdas de azúcar
Modo de preparación
Comienza la receta preparando el prefermento. Coloca la leche en una cacerola. Puedes utilizar tanto la leche entera como descremada. Pone la leche a fuego y cocina hasta hervir. La leche hervida hará que la masa quede más manejable.
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En cuanto empiece a hervir apaga el fuego, tapa la cacerola y deja que se enfríe hasta el punto de estar templada.
En un bowl pone la levadura. Añade la leche y remueve bien. Utiliza solo ½ taza de leche, hay que hervir mayor cantidad de leche porque al hervir se evapora.
Luego agrega la harina y mezcla hasta integrar. ahora deja el prefermento en reposo hasta que se active la levadura, de 20 a 30 minutos. Así también comprobaras que la levadura funciona.
Mientras tanto, ralla la naranja. Recuerda solo usar la parte naranja y no lo blanco que es amargo.
Cuando el prefermento este listo colócalo en un bowl mas grande y comienza con la masa.
Añade los huevos, la ralladura de naranja, la esencia de vainilla y el azúcar. Mezcla todos los ingredientes hasta integrar completamente.
Por último, suma la harina tamizada, la sal y mezcla hasta que no haya restos de harina. Termina de formar un bollo de masa con la mano. Tapa el recipiente y deja la masa en reposo 20 minuto.
Una vez que pase el tiempo de reposo, vuelca la masa sobre la mesa y amasa por 5 minutos hasta que se vuelva lisa y uniforme. Veras que es una masa bastante fácil para amasar.
Pasados los 5 minutos o cuando veas que la masa tiene la textura y color uniforme, debes comenzar a ir añadir la manteca, que tiene que estar pomada. Debes que hacerlo en 2 partes.
Si vas amasar la masa en una amasadora, el procedimiento sería el mismo. Primero tendrías que amasarla 5 - 8 minutos en 2º velocidad y luego ir añadiendo la manteca poco a poco.
Después de integrar la primera parte de manteca, añade la manteca restante y continúa amasando. En total debes amasar la masa 16 - 18 minutos. Con una amasadora el tiempo sería parecido.
Coloca la masa en un recipiente con un poco de aceite en la base, tápalo y deja que la masa suba duplicando su tamaño, entre una hora y media y 2 horas y media, según la temperatura que tengas en casa.
También puedes dejar levar la masa 30 minutos y luego guardarla en la heladera de 8 a 12 horas. Es decir, puedes preparar la masa por la noche, guardarla en la heladera y al día siguiente hacer la babka.
Para preparar el relleno coloca la manteca en una cacerola y derrítela un poco. Sólo para que engrase el fondo. Después añade el chocolate, remueve y derrite el chocolate. Una vez el chocolate esté totalmente derretido retira la cacerola del fuego.
Ahora añade el azúcar glass o en su reemplazo azúcar impalpable (si bien es menos fina que el azúcar glass, igual te servirá para este relleno), la sal y el cacao en polvo sin azúcar. Remueve todo muy bien y deja que el relleno se enfríe hasta alcanzar la temperatura ambiente.
Cuando la masa este lista, espolvorea la mesa con harina y vuelca la masa. Debes estirarla hasta alcanzar un rectángulo de 45 cm de largo y 25 - 28 cm de ancho. Primero puedes hacerlo con las manos y luego con el rodillo.
Extiende el relleno por encima. Cuando veas que en el relleno se quedan las marcas, que no desaparecen, enrolla la masa. Así al enrollar no se te va salir el relleno.
Una vez que tienes el rollo listo, córtalo en dos partes, a lo largo.
Con ambas partes forma un trenzado.
Unta el molde de aproximadamente 24x12 centímetros con un poco de manteca, fórralo con papel para hornear y coloca la babka.
Tápalo con un trozo de film transparente y deja en reposo por una hora aproximadamente o hasta que haya duplicado su tamaño. 20 minutos antes de que termine el levado enciende el horno a 170°C con calor sólo de abajo.
Para hacer el sirope pone a fuego una cacerola, añade el agua y el azúcar. Calienta hasta que se derrita el azúcar. Si quieres puedes añadir 1 chorrito de ron o de coñac o de otro licor que te guste. Una vez listo, apártalo del fuego y reserva hasta el final de la receta.
Pulveriza la babka con un poco de agua y llévalo al horno. Pasados 10 minutos del horneado pone el calor de arriba y abajo. Una vez haya tomado color sube la temperatura a 180° para que se dore por igual por todos los lados. Y, también, puedes taparla con papel de aluminio para que no se dore más por arriba.
Una vez lista, saca la babka del horno y, sin desmoldarla, pincélala por arriba con el sirope. El sirope restante echalo por los bordes.
Déjala 10 minutos en el molde para que absorba la humedad del sirope, luego puedes desmoldarla y colocarla sobre una rejilla para que se enfríe.
Una vez fría ya puedes disfrutar de esta receta de babka super húmeda y deliciosa.
Babka, significado, historia y su momento más famoso
El nombre babka significa ‘abuela’ en ruso y polaco, y se refiere a la forma del pastel, que parece una falda plisada, tiene su origen en el siglo diecinueve, cuando los cocineros polacos lo impulsaron como un postre tradicional para el domingo de Pascua. Gracias a su delicioso sabor, con el tiempo, la receta se extendió en principio a otros países de Europa del Este, como Eslovaquia, , Eslovaquia, Ucrania, Bielorrusia y Rusia Occidental. Por aquel entonces, la religión judía lo adoptó como parte de su repostería característica y en las migraciones de finales del mismo siglo de su nacimiento llegaría a suelo norteamericano.
No obstante ello, la receta tendría su momento más famoso en la cultura popular cuando en un episodio de la serie Seinfeld en el año 1994, donde los protagonistas intentan comprar un babka de chocolate para llevar a una cena y se encuentran con que solo queda uno de canela, algo que consideran inferior.