Su nombre científico es Pachyphytum compactum, pero se ha popularizado como Pequeña Joya, y se explica por la característica forma de sus hojas, muy similares a las caras talladas de una piedra preciosa. Esta suculenta crece con una longitud de 4 cm y hasta 1,5 de ancho, formando bellas rosetas a su alrededor.
Es una planta originaria de México, centrando su localización en Querétaro e Hidalgo. Por lo que los climas cálidos e iluminados son los preferidos por esta suculenta que se distingue por sus hojas carnosas y puntiagudas con ángulos formados en la parte superior.
Recomendaciones para su cuidado
Debido a su lugar de origen, se trata de una especie que prospera preferentemente en climas secos, expuestos a altas temperaturas y con la constante iluminación directa del sol. No resistirá a las temperaturas inferiores a los -6°, priorizando en invierno la mayor cantidad de luz directa que sea posible.
Al ser una suculenta del desierto, el tema del riego es uno de los más sencillos. En otoño y primavera necesitará apenas algunos riegos ocasionales, cuando el sustrato esté completamente seco. Mientras que en invierno es cuando más riegos necesita, ya que representa su etapa de crecimiento.
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En cuanto al sustrato tampoco es tan demandante, se puede utilizar uno especial para cactus o suculentas, o bien realizar uno casero, simple y eficaz mezclando, en partes iguales, arena y humus. En el período que va desde la primavera hasta el otoño se le puede aplicar fertilizante de forma mensual.
Mientras que, en caso de necesitar trasplantar a esta suculenta, se debe realizar únicamente en el período comprendido entre finales del invierno hasta comienzos de la primavera. Recordemos que se trata del momento en donde adquiere mayor importancia su desarrollo y crecimiento.
Y por último no se trata de una suculenta muy permeable a las plagas o enfermedades, siendo solamente las cochinillas algodonosas una de sus mayores amenazas. Con un insecticida especial para este insecto se podrá prevenir, o llegado el caso, combatirlos.
Su tamaño es ideal para decorar el interior del hogar, recordando siempre priorizar su constante iluminación solar, pero también funciona en medio de la vegetación del jardín, con sus bellas hojas similares a las piedras preciosas, de una atractiva tonalidad verde mate. La suculenta Pequeña Joya gana cada día nuevos adeptos.