En cada una de las notas y entrevistas que brinda a la prensa, Luciana Salazar asegura que la llegada de su hija Matilda cambió su vida para siempre y que tras convertirse en madre conoció el verdadero amor.
Sin embargo, desde las redes sociales, la actriz Luciana Salazar también suele expresar el amor y el inmenso orgullo que siente por su hija Matilda, de tan solo 5 años, quien recientemente sorprendió a todos con una habilidad desconocida.
Sucede que hasta el momento hemos visto a la hija de la bailarina tomando el té elegantemente y luciendo los outfits más fashionistas y perfectamente matcheados con los de su madre.
No obstante, en las últimas horas, con un video publicado en su perfil, Matilda demostró que tiene un notable talento para el canto y compartió su habilidad vocal con sus casi 400 mil seguidores.
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“No soy solo la que toma el té, también soy este ‘personaje’ como me llama mami. Afino?”
Sin dudas que esta breve descripción del video fue escrito por Luciana, quien apeló al humor para presumir esta dulce escena en la que se puede ver a su primogénita en la intimidad de su clase de canto.
Al mismo tiempo, la vedette replicó esta enternecedora escena en su perfil de Instagram y allí sacó a relucir nuevamente el orgullo que siente por el constante aprendizaje que demuestra Matilda con el paso del tiempo.
“Sos tan lo más.”
De esta manera, salió a la luz que la pequeña Matilda marcha a paso firme en el camino a convertirse en una artista íntegra y su madre se muestra completamente feliz y orgullosa por poder acompañarla en este camino en el que puede hacer lo que tanto le gusta.
Ternura total
Para que no queden dudas de que la pequeña no para de sorprender a todos, incluso a su propia madre, la artista decidió mostrar desde sus “stories” lo rápido que está aprendiendo su hija el contenido que le enseñan en su escuela, especialmente en el manejo de idiomas.
Tal es así, que en las imágenes se la puede ver a Matilda hablando en inglés con absoluta fluidez para comunicarse con sus profesores y compañeros y hasta logra identificar el nombre de algunos objetos para luego colocarlos en su correspondiente lugar dentro del alfabeto, lo que provoca que Luciana Salazar infle el pecho de orgullo.