Si alguna planta en tu hogar, sea en el interior o en el jardín, se muestra visiblemente dañada, antes de pensar en cortarla o quitarla, quizás sea buena oportunidad para probar otra solución, más aún, si ésta puedes ejecutarla con ingredientes que tienes en el hogar o bien, que son fáciles de conseguir.
Ya sea que la planta se haya puesto en mal estado por falta de cuidado específico, plagas, hongos o simplemente, por haber quedado expuesta a condiciones climáticas muy extremas de frío o calor, este potente y efectivo abono casero logrará en poco tiempo que tu planta pueda reponerse rápidamente para volver a lucir radiante.
Así que, para erradicar problemas que incluso pueden estar enfermando sus raíces, vamos a preparar un efectivo fertilizante casero que ayudará a que recupere todos los nutrientes necesarios para volver a lucir un aspecto único y saludable.
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Para obtener este reparador abono solo vamos a necesitar: un litro de agua sin cloro, dos puñados de avena integral y 100 gr de semillas de chía. El primer paso consiste en colocar la avena dentro de una botella grande que contenga un litro de agua.
Luego le añadimos la chía y dejamos la botella en un sitio oscuro por 72 horas, para conseguir que las semillas de chía comiencen a germinar y allí despidan la mayor cantidad de hormona auxina, la cual ayuda al crecimiento y desarrollo de la planta.
Pasado ese tiempo colocamos la mezcla en una licuadora para que las semillas y la avena se trituren por completo y añadimos la preparación en un recipiente o bidón de 8 litros, donde además de esta mezcla debemos incorporar siete litros de agua.
Por último, debemos regar nuestras especies más dañadas con este líquido cada tres días y con el paso del tiempo notaremos que sus hojas recuperan su color verde y que comienza a mostrarse mucho más fuerte y saludable desde la raíz a la punta, ya que su crecimiento y floración se verán potenciados por este potente abono casero.
Beneficios y propiedades
La elección de los ingredientes para preparar este fertilizante no es azarosa, más bien está relacionado con las valiosas propiedades que ha demostrado la avena, la cual contiene potasio, fósforo, zinc, magnesio, folato y vitamina B1 que ayudan notablemente a las especies de nuestro jardín.
Lo mismo sucede con las semillas de chía ya que además de fósforo, potasio, calcio, hierro, magnesio, vitaminas y proteínas, produce la valiosa hormona auxina que impacta considerablemente en el desarrollo de nuestras plantas y en su saludable aspecto.