En el año 2003, Yang Liwei se convirtió en el primer astronauta chino en ir al espacio y posteriormente, el protagonista de lo que bien podría ser una espeluznante historia de terror con extraterrestres de por medio.
A mediados del siglo veinte la humanidad se propuso como objetivo la conquista espacial y por supuesto, la búsqueda de vida extraterrestre y sin dudas, la anécdota de Yang Liwei podría ser parte de ello.
La cuestión es que este astronauta se encontraba solo en su cápsula a millones de kilómetros de su casa y rodeado de los 270 grados centígrados que componen en el espacio exterior.
Siendo el único ser vivo orbitando el Planeta Tierra, Yang Liwei es sorprendido por un golpe que llamó su atención. A su regreso lo describió como “un martillo de madera contra un cubo de hierro”.
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Pero al revisar los datos de la nave, el astronauta no encontró indicios que le ayuden a develar la causa mecánica del misterioso sonido que escuchó en el medio del universo, sabiendo que se encontraba complemente solo.
Incluso, el propio Yang Liwei relató que miró por el ojo de buey de su cápsula a la espera de encontrar una explicación por fuera de su ventana. Pero a su alrededor no había nada.
¿Fantasía o realidad?
A su regreso, Yang Liwei intentó recrear dicho sonido que perturbó la paz espacial pero lo cierto es que no tuvo mucho éxito. De ahí en adelante, la posibilidad de una vida extraterrestre se abrió paso a fin de explicar dicho fenómeno.
Sin embargo, en varias entrevistas que el astronauta dio a los medios, mencionó que el sonido podría provenir de “la reducción de la presión de aire que provocaba cambios en la estructura de la nave espacial al salir de la atmósfera terrestre e ingresar al espacio”.
Lo cierto es que, hasta el momento las causas no son concretas y muchos optan por no descartar la posibilidad de que haya sido causado por vida extraterrestre, la cual golpeaba la puerta de su nave como queriendo entrar.