Los cactus son sin dudas unas de las plantas más populares a la hora de la decoración, principalmente por los pocos cuidados que necesita para subsistir.
Siendo parte de la familia de las suculentas, los cactus tienen la capacidad de conservar el agua en sus tallos y por ende, son muy resistentes a las épocas de sequía.
Sin embargo, algunos amantes de las plantas suelen llevar a cabo una técnica un tanto peculiar que se la conoce como injerto. La misma se basa en añadir pequeños cactus que cuentan con vistosos injertos de vivos colores.
Pero lo cierto es que este tipo de cactus no son tan resistentes como los demás siendo esencial prestar cierta atención a los cuidados para garantizar su supervivencia en óptimas condiciones.
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Luz
A diferencia de los convencionales, los cactus injertados no toleran el sol de manera directa. Es por ello que se recomienda ubicarlos en el interior cerca de una ventana para que reciba la luz solar a través de un filtro de cortina o bien mantenerlos afuero pero asegurándonos que no quedarán expuestos en las horas centrales.
Riego
En cuanto al riego, los cactus injertados no toleran los encharcamientos de suelo o el agua constante. En este caso se sugiere que el riego sea más bien espaciado controlando de perder humedad en la tierra. Tampoco se recomienda colocar un plato en la base a fin de que no retenga agua.
Abono
Como toda planta, nutrir la tierra con abonos en esencial, sobre todo en los cactus. Para ello se pueden generar algunos fertilizantes naturales o bien conseguir los que se comercializan en las tiendas especializadas. A la hora de aplicarlos, procuraremos de hacerlo con bajas dosis en verano y altas en invierno. Esto se debe a que el riego varía según la estación del año.
Trasplante
Si la intención es cambiar la maceta del cactus por una más grande, es importante tener en cuenta la cuestión del sustrato, el cual debe contar con un buen drenaje. Para ello se pueden conseguir los que ya vienen preparados o bien incorporar la tierra arena de sílice o grava volcánica para mejorar su aireación.
Plagas
Por último, una de las plagas más comunes que se ve en los cactus injertados es la cochinilla. Para poder combatirla de manera efectivo habrá que comenzar con el tratamiento de manera inmediata, evitando que el insecto endurezca su caparazón.