Para aquellos que poseen u amplio jardín lleno de plantas ornamentales o que brinden sus frutos, algunos los insectos y plagas pueden resultar muy dañinos. Es por ello que se requiere de un insecticida para erradicarlos.
Sin embargo, pese a todas las posibilidades que nos ofrece el mercado, lo cierto es que los insecticidas comerciales pueden ser tan perjudiciales para la salud como para el medio ambiente.
Su uso puede acabar con la plaga deseada, pero a la vez también extermina a otros insectos que podrían ser potenciales beneficiosos para tus cultivos. Además, estos productos suelen dejar residuos que traspasan tanto el gua como la tierra, poniendo en riesgo a las personas mediante le contacto.
Es por ello que hoy te enseñaremos a crear tres insecticidas naturales para mantener a raya las plagas de tu jardín, utilizando ingredientes seguros que no pongan en riesgo tu salud.
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Limón
Uno de los ingredientes más efectivos que existe para acabar con lo pulgones es el limón. Para ello, solo necesitaremos un poco de cáscara de limón y agua.
El procedimiento es bastante sencillo. Retiramos la cáscara del limón y la dejamos reposar en agua previamente hervida durante la noche. Pasadas al menos ocho horas, colamos la preparación y la colocamos en un atomizador para plantas.
La idea será rociar directamente contra la plaga de pulgones, cubriendo bien todas las hojas infectas con la preparación.
Ajo
Para conseguir un insecticida natural a base de ajo, lo que debemos hacer es triturar cinco cabezas y mezclarlas en un litro de agua. Luego de haber reposado durante toda la noche, agregaremos unas pequeñas gotas de detergente o jabón para platos.
Una vez realizado, colaremos el agua restante y la añadiremos otros 4 litros de agua. Así, nuestro insecticida estará listo para su uso. Cabe destacar que esta mezcla no distingue entre insectos positivos y negativos, razón por la cual se recomienda aplicar solo sobre la zona afectada.
Pimienta
La pimienta también puede ser un gran aliado para mantener a raya a los insectos del jardín. No obstante, cabe destacar que su aplicación requerirá de una cierta protección dado que su contacto con la boca, ojos o nariz puede ser muy agresivo.
Para la preparación necesitaremos picar dos tazas de pimiento, sumando un diente de ajo y una cucharada de pimienta de cayena. Se pude utilizar la multiprocesadora para conseguir la textura de un puré.
Una vez realizado, mezclaremos con cinco litros de agua, agregamos unas gotas de detergente y dejamos reposar la preparación durante toda la noche. Por último, colaremos el líquido y lo pasaremos a un atomizador para poner en práctica nuestro insecticida casero, procurando rociar toda la planta.