Inició el proceso de vacunación en las unidades penitenciarias de la provincia de Buenos Aires (PBA) como resultado de la lucha de organizaciones sociales por los derechos humanos de las personas privadas de la libertad.
El hacinamiento en los penales es preocupante y representa un alto riesgo epidemiológico, por eso la Secretaría de Salud Penitenciaria determinó la puesta en marcha de la inmunización a la población carcelaria en el Plan Estratégico de Vacunación.
La Secretaría de Derechos Humanos del Movimiento Evita se reunió con el director de Zona Sanitaria VIII para nuclear al Ministerio de Salud con el área de salud penitenciaria y así llevar adelante la vacunación para personas en contextos de encierro. La idea es aportar al sistema penitenciario la experiencia ministerial de 7 meses de inoculaciones.
Condiciones habitacionales en las cárceles
La superpoblación agrava las condiciones de detención y el horizonte está en bajar el índice de reincidencia en los delitos graves, para lo cual se necesita un proyecto pedagógico dentro de la cárcel que fomente la cultura laboral y educativa.
Mientras tanto, se están edificando nuevas cárceles en PBA. Esta medida punitiva puede significar un parche para el hacinamiento en los penales, pero no implica políticas públicas integrales necesarias para generar empleo ni para erradicar el hambre en la Argentina.