El vuelo AR1079 de Aerolíneas Argentinas proveniente de Pekín arribó al país con 768 mil dosis de Sinopharm ayer. Con este lote Argentina superó las 32 millones de inoculaciones recibidas en el marco del Plan Estratégico de Vacunación contra el coronavirus.
Desde el comienzo de este operativo especial, este es el quinto vuelo de los diez que habrá durante julio para importar 8 millones de dosis. Según lo acordado con el China National Pharmaceutical Group Corp., Argentina recibirá hasta septiembre 24 millones de vacunas.
Horas antes había partido desde la misma pista el que será el sexto vuelo dentro de la programación de la logística, y retornará al territorio nacional el día sábado a las 19.10.
De las 32.023.730 dosis recibidas, estas son las cifras según cada tipo de vacuna:
- 11.868.830 corresponden a Sputnik V, (9.375.670 del componente 1 y 2.493.160 del componente 2);
- 9.840.000 a Sinopharm;
- 580.000 a AstraZeneca-Covishield;
- 1.944.000 a AstraZeneca por el mecanismo COVAX de la OMS;
- 7.790.900 a las de AstraZeneca y Oxford, cuyo principio activo se produjo en la Argentina, según informó el Gobierno.
Efectividad en la defensa
Según estudios recientes revelados por el CONICET, las vacunas Sputnik V y Sinopharm generan alta inmunidad celular en más del 80 % de los casos. La Plataforma permite estudiar la respuesta inmunológica T, un tipo de inmunidad distinta al efecto de los anticuerpos, según se explicó
A través de la plataforma de monitoreo “COVID-T”, desarrollada por científicos argentinos, se pudo conocer que la vacuna rusa alcanza el 90 % efectividad y es la de origen chino la que llega al 80 %.
Fuente: (Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación)
El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, afirmó que “la gran respuesta al linfocito T implica que en esa línea está lo que va a perdurar como defensa en el tiempo. Quedan esos linfocitos de memoria que registran al coronavirus y lo guardan en la memoria”.
Cuando vuelven a tener contacto con ese virus, rápidamente generan anticuerpos y células ‘killers’ que matan al virus