En el Obelisco porteño, un grupo de organizaciones piqueteras se manifestaron contra el ajuste y contra la miseria a través de la organización de un ollazo nacional contra el hambre, que incluyó el anuncio de un plan de lucha piquetera.
Desde las 10 de la mañana, cientos de personas concentraron en el Obelisco para llevar a cabo un ollazo nacional. El objetivo fue poner de manifiesto la delicada situación que viven millones de laburantes en el país.
En la jornada se repudió el crecimiento de la desocupación, del hambre y de la miseria social; al mismo tiempo, se pidió trabajo genuino, universalización del seguro al desocupado, y aumentos de cantidad y de calidad de alimentos para comedores populares.
La jornada fue protagonizada por distintas agrupaciones que conforman la Unidad Piquetera, entre las que se destacó el Polo Obrero. Esta última destacó la existencia de 18,5 millones de personas que se encuentran desocupadas y 5 millones de personas en situación de indigencia.
Al respecto, señaló que el Gobierno eligió continuar la ruta de ajuste dictada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el recorte de la partida alimentaria, insuficiente para actuar sobre las necesidades básicas en aumento.
La actividad tuvo eco en distintas localidades argentinas, donde se manifestó la emergencia de la situación que afecta a la totalidad de la población que habita el territorio nacional.
La entidad convocante denunció el precio de la canasta básica familiar ($70.000), mientras los montos recibidos por programas sociales tienen acceso limitado y apenas alcanzan la mitad del valor del salario mínimo, es decir, $16.000.
Además, en el acto, manifestante resaltaron la provisión de los alimentos, a la que tildaron de acotada y de insuficiente. Muchas veces, las entregas no son continuas y la calidad de los alimentos se ve deteriorada.