Jonathan Alejandro Espósito, sobrino de Diego Armando Maradona, y Christian Maximiliano Pomargo, exasistente del genio de fútbol mundial y cuñado de Matías Morla, dieron declaraciones judiciales.
Las ampliaciones de sus declaraciones dejaron en serios problemas al personal de salud que atendía al genio del fútbol mundial en la precaria internación domiciliaria.
El exmano derecha y el sobrino de Diego Armando apuntaron contra el cuerpo médico por el pésimo desempeño en el ejercicio de sus funciones de cuidado.
Los médicos y enfermeros imputados están apuntados por el descuido y el destrato a "Pelusa". En los últimos días, "el Diego" estaba visiblemente hinchado y deprimido, no salía de su habitación y nadie actuó al respecto.
La Fiscalía General de San Isidro tomó las ampliaciones de las declaraciones testimoniales de Christian Maximiliano Pomargo (de 42 años) y de Jonathan Alejandro Espósito (37 años), las cuales incriminan aún más a los implicados.
Las preguntas de Cosme Iribarren, de Laura Capra y de Patricio Ferrrari giraron en torno al estado de salud de Diego Armando Maradona durante los últimos meses previos a su paso a la inmortalidad.
“Esos días no vino nadie”, declaró Espósito. Aunque a él podría caberle una responsabilidad en ese abandono de persona, recalcó que su función era quedarse con Diego “a dormir, como cualquier familiar”.