Días atrás, durante el transcurso de una clase por zoom, la directora del Consejo de Discapacidad de la localidad rionegrina de Fernández Oro, Miriam Cueto, se expresó con un repudiable insulto mientras se desarrollaba la capacitación de Lengua de Señas Argentina.
La directora, que probablemente creía tener el micrófono apagado, se dirigió a uno de los alumnos, que estaba comunicándose, con insultos, con los que justificó que no se le entendía nada. Ante tal actitud fue criticada desde entidades promotoras de los derechos de las personas con discapacidad.
Quien salió a hacer declaraciones sobre esta situación bochornosa fue la influencer y licenciada en Comunicación, Daniela Aza, referente de Discapacidad y Diversidad. Al respecto, en una entrevista con "El Colectivo" expresó:
Es indignante y genera bronca, ya que habla de un imaginario en torno a la discapacidad, que tiene que ver con el rechazo a lo diferente, la no aceptación de otros cuerpos, la estigmatización reiterada y la violencia que enfrentamos las personas con discapacidad diariamente. Siento que es un resultado, también, de falta de visibilidad de políticas educativas que promuevan el respeto hacia las personas con discapacidad
Daniela Aza y la inclusión
Con una cuenta en Instagram con 25,9 seguidores, Daniela Aza es un ejemplo de esfuerzo y pasión por lo que hace. A sus 36 años, y con Artrogriposis Múltiple Congénita (AMC), un síndrome neuromuscular, la influencer inspira y motiva a muchos de sus seguidores, con los que interactúa diariamente, en la red social.
Aza, sostiene que, en estos tiempos que corren, una persona con discapacidad merece igualdad de oportunidades y la posibilidad de acceder libremente a los diferentes ámbitos de la sociedad. Indica que para eso es importante encaminarnos hacia un futuro más inclusivo para las nuevas generaciones, que ya tienen otra mentalidad más abierta, pero que necesitamos afianzar. En torno a este contexto, sostiene que para que haya este tipo de cambios se debe contar con mas inclusión en el ámbito laboral y, por tal razón, expresó:
La lengua de señas debe incorporarse en la escolaridad, porque eso implicaría mayor inclusión hacia las personas sordas, quienes diariamente viven la exclusión y no solamente se encuentran segregadas sino que no pueden acceder a servicios básicos por falta de intérprete de lengua de señas, o a información