Pocos aromas son tan reconfortantes como el de un budín recién horneado. Su fragancia nos invita a disfrutar de un momento especial, transformando cualquier tarde en una experiencia deliciosa y memorable.
Hoy te traigo una receta infalible y fácil, para que sin necesidad de ser experto en pastelería, logres un budín de limón suave, esponjoso y con la textura perfecta. ¡Manos a la obra!
Ingredientes para un budín irresistible
3 huevos
1 taza de azúcar
1 taza de aceite neutro (como girasol)
1 limón (ralladura y jugo)
2 tazas de harina común
1 cucharadita de polvo de hornear
Paso a paso para una textura impecable
Precalienta el horno a 180°C para que el budín leve perfectamente. Bate los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y pálida. Incorpora el aceite poco a poco mientras sigues batiendo hasta integrar completamente.
Añade el limón: Ralla la cáscara sobre la mezcla y luego agrega su jugo para intensificar el sabor.
Integra los secos: Tamiza una taza de harina junto con el polvo de hornear y mézclalos con movimientos envolventes. Suma la segunda taza de harina y continúa mezclando hasta que quede una textura homogénea y sin grumos.
Prepara el molde: Engrásalo con manteca y espolvorea harina para evitar que el budín se pegue. Hornea de 35 a 40 minutos, sin abrir el horno en los primeros 30 minutos para que leve bien.
Verifica la cocción: Inserta un palillo o cuchillo, si sale limpio, el budín está listo.
Enfría y desmolda: Déjalo reposar 20 minutos antes de retirarlo del molde.
Disfruta el budín de limón perfecto
Este budín de limón esponjoso y sabroso es una receta ideal para acompañar mate, té o café. Cada bocado es un abrazo dulce que encantará a todos.