Las palmeritas de hojaldre son un clásico que nunca falla, y lo mejor es que no necesitas ser un experto en repostería para lograr resultados espectaculares. Siguiendo esta receta, lograrás ese hojaldre ligero, crujiente y dorado que hará que todos pidan más.
La magia del hojaldre radica en su estructura: capas finas de masa que, con la receta adecuada, se transforman en una maravilla de la repostería. Y aquí está el secreto: la clave para lograr esa textura perfecta está en el proceso de doblado y el tiempo de reposo.
Con nuestra guía paso a paso, dominarás el hojaldre y descubrirás cómo obtener una masa perfectamente aireada y crocante. ¡Prepárate para deleitar a todos con estas delicias!
Ingredientes esenciales
500 gramos de harina 0000
1 cucharadita de sal marina
30 gramos de azúcar
30 gramos de manteca
450 gramos de margarina
280 gramos de agua
Paso a paso para un hojaldre impecable
Preparación de la masa: mezcla harina, sal, azúcar y manteca en un bowl. Agrega el agua y amasa hasta obtener una textura homogénea. Déjala reposar por 30 minutos para que desarrolle elasticidad.
El empaste perfecto: corta la margarina en trozos y forma un rectángulo dentro de una bolsa. Estira hasta lograr un cuadrado de aproximadamente 17x20 cm.
El secreto del estirado y doblado: extiende la masa en una superficie enharinada, coloca el empaste en el centro, dobla los extremos y deja reposar 15 minutos. Repite el proceso 6 veces para lograr capas ultracrujientes.
Congelación inteligente: si no vas a usar toda la masa de inmediato, ¡no hay problema! Puedes congelarla por hasta 4 meses sin perder calidad.
El momento de crear las palmeritas
Estira un trozo de masa sobre azúcar y córtalo en secciones. Dobla hacia el centro desde ambos lados y corta en tiras de 1 cm. Coloca las palmeritas en una bandeja con papel manteca, separadas entre sí. Hornea a 190°C por 15 minutos, voltea cada pieza y hornea por otros 15 minutos hasta que estén doradas y crujientes.
¡Y listo! Palmeritas doradas, hojaldradas y listas para disfrutar con un café, un té o simplemente por puro placer.
Anímate a probar esta receta y descubre el increíble mundo del hojaldre en tu propia cocina. ¡La repostería nunca fue tan fácil y deliciosa!