A través de distintas tareas de control y fiscalización realizadas por AFIP, 176 contribuyentes perdieron los beneficios del blanqueo de activos no declarados que tuvo lugar durante el gobierno macrista.
Inicialmente, durante su presidencia, Mauricio Macri se permitió que ingresaran al blanqueo gobernadores, intendentes, legisladores, familiares de funcionarios e incluso familiares del propio exmandatario.
Este blanqueo funcionó desde julio del 2016 hasta marzo de 2017, pero recién en el año 2019 comenzaron las fiscalizaciones de AFIP sobre los ingresantes en este plan y las numerosas irregularidades que presentaban.
Con la gestión de Mercedes Marcó del Pont al frente de AFIP, empezaron a realizarse diferentes investigaciones sobre blanqueadores a los que se les había detectado inmuebles y activos no declarados.
De estas investigaciones impulsadas durante el gobierno de Alberto Fernández, se produjo el decaimiento de los beneficios del blanqueo en 176 casos en todo el país.
Además, se les reclaman las diferencias por los impuestos impagos (Bienes Personales, Ganancias y/o IVA) correspondientes a los períodos anteriores al régimen de blanqueo macrista. Esta diferencia es cercana a los 100 millones de pesos, deuda que algunos de los contribuyentes ya comenzaron a ingresar.