El referente del Movimiento Evita, Gildo Onorato, destacó, a través de conversaciones radiales, la importancia de que la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) ya cuente con personería social, porque significa el establecimiento de representatividad de las personas que la conforman y de su labor.
En este sentido, resaltó la labor de los miembros de la UTEP y su reconocimiento. Explicó que dentro de la Unión se pueden diferenciar tres grandes sectores: uno, que a través de capacitaciones ha podido reinsertarse en el mercado formal del trabajo. Otro, que según afirmó, está muy golpeado; y después otro —que es el núcleo central de la economía popular—, que son las actividades consolidadas en unidades productivas, en instrumentos de gestión articulada en distintas experiencias como el reciclado urbano o la agricultura familiar.
A ese sector necesitamos inyectarle, además de ingresos, el acceso al crédito productivo para ganar en escala, generar comercialización y, sobre todas las cosas para que podamos, desarrollarlas y aporten al desarrollo productivo del país, al desarrollo de las economías regionales
Onorato se refirió, también, a los planes sociales otorgados por el Estado, “desde la Caja PAN hasta los subsidios de hoy”: el referente afirmó que estos métodos no han sido efectivos para frenar la pobreza, y que los planes sociales tienen que ser transitorios.
Los gobiernos de todos los signos políticos siempre han abordado la política social a través de planes sociales y han limitado la posibilidad de que ese trabajo sea el ordenador hacia el futuro
Onorato reflexionó sobre el reconocimiento del Gobierno y afirmó que esta representación les permite discutir la subsistencia básica de la economía popular, en el marco de diversas decisiones que habitualmente toma el Estado. Asimismo, afirmó que es fundamental poner al trabajo como ordenador social y a la producción como mecanismo de crecimiento de la economía.