Recientes relevamientos de la Fundación Observatorio Pymes, y del Centro de Desarrollo Pyme de la Universidad del Centro de Estudios Macroeconómicos de Argentina (UCEMA), mostraron que la legislación laboral que se implementó en pandemia complejiza la contratación de nuevo personal para las empresas que comienzan a superar la crisis.
La medida fue efectiva en el ámbito del empleo formal, no se despidieron laburantes sin causa y esta dificultad para contratar nuevo personal es síntoma de que hay pequeñas y medianas empresas que han superado la crisis económica que trajo aparejada la pandemia.
Pasado el período más duro de la pandemia, los efectos de la medida son otros, y es complicado establecer nuevos contratos laborales, según informes de la Fundación Observatorio Pyme (FOP) y del Centro de Desarrollo Pymes UCEMA (CDPymes).
El FOP arrojó que el 72 % de las pymes se consideran afectadas negativamente por la normativa, un 38 % de tales empresas considera que les impide reestructurar el propio personal y un 34 % advierte que les genera dificultades para la contratación de nuevo personal.
El informe del FOP expone que el 67 % de las empresas que se ven dificultadas para la reestructuración tiene todo su personal inactivo por el cumplimiento protocolar y por las restricciones vigentes en la pandemia. Esto demanda mayores costos de producción que no todas las empresas pueden compensar con aumentos de productividad, pero representa una garantía laboral para sus empleadas y empleados.
La evaluación que hacen las empresas de las regulaciones actuales en el mercado laboral en materia de despidos es producto de un informe previo sobre 1025 pymes, de 0 a 800 empleados, en todo el país, que son de los sectores de agricultura, ganadería, silvicultura, pesca y minería, comercio, construcción, industria manufacturera, y servicios profesionales.