El expresidente Mauricio Macri tiene una grave denuncia por supuesto espionaje ilegal a los familiares de las víctimas del hundimiento del submarino ARA San Juan. Por tal causa, está citado para dar explicaciones ante la Justicia.
Macri, sin embargo, usó su cuenta oficial de Twitter, no para dar explicaciones de por qué no estaba en Argentina —ya que en este momento no se le permite salir del país—, sino para sumarse a la discusión mediática en la que están implicados el dibujante Nik, ferviente militante macrista, y el actual ministro de Seguridad Aníbal Fernández.
De repente, Aníbal Fernández se vio envuelto en una acusación por intimidación y amenaza tras haber contestado a uno de los provocadores “chistes” de Nik.
El dibujante, que puso el grito en el cielo, manifestó que Fernández estaba amenazando a sus hijas. El ministro por su parte pidió disculpas: “Si por cualquier cosa entendiste que esa expresión fue una amenaza, me disculpo. No se me caen los anillos” y alegó que Nik "agravia" muchas veces al peronismo con sus "chistes". ¿Le molesta al dibujante cuando le responden? Parece que sí.
Fuente: (TN).
Quien se sumó escandalizado a la ola de tuits fue Mauricio Macri, que expresó: “TODOS SOMOS NIK”, y siguió:
No salgo de mi asombro. El ministro de seguridad Aníbal Fernández amenazó a Nik por criticar desde un tuit la entrega de heladeras, garrafas y viajes de egresados con fines electorales
El hilo del expresidente buscado por la Justicia siguió: “Ya le dijimos “basta”, ya no le tenemos miedo, somos millones los que sentimos este hastío”. Y, siguiendo con el tono golpista con el que viene expresándose últimamente, Macri dijo:
El final de esta época oscura está cerca
Algunos "chistes" de Nik que agraviaron al peronismo