Aunque el frío del invierno puede hacer que las garrapatas parezcan menos activas, no desaparecen por completo. De hecho, muchas de ellas buscan refugio y pueden volver con fuerza cuando las temperaturas aumentan.
Por eso, este es el momento ideal para preparar tu jardín y asegurarte de que, cuando llegue la primavera y el verano, tu espacio verde esté libre de estos molestos ácaros.
Una solución natural y efectiva es la Monarda, una planta resistente que, además de aportar color y belleza, actúa como un repelente natural contra las garrapatas.
¿Por qué cultivar Monarda en invierno?
La clave para mantener a raya a las garrapatas está en planificar con anticipación. La Monarda es una planta perenne que puede cultivarse desde el invierno en zonas de clima templado, permitiendo que se establezca bien antes de la llegada del calor.
Una vez asentada, la Monarda comienza a florecer con la llegada de la primavera y el verano, ofreciendo una explosión de colores y un intenso aroma cítrico que resulta insoportable para las garrapatas, pero agradable para las personas.
Beneficios adicionales de la Monarda
Además de su capacidad para repeler garrapatas, la Monarda es una planta sumamente atractiva para los polinizadores, como abejas, mariposas y colibríes. Esto la convierte en una excelente opción para quienes desean un jardín más biodiverso y lleno de vida.
También es muy resistente al frío, especialmente cuando se planta en suelos bien drenados y con cierta protección contra heladas severas.
Cómo Plantar Monarda en Invierno
Si bien la Monarda prospera en climas cálidos, puede cultivarse en invierno si se protege adecuadamente. Algunas recomendaciones incluyen:
Elegir un lugar soleado: Aunque las temperaturas sean bajas, es importante que reciba luz directa.
Protegerla de heladas extremas: Puedes cubrirla con mantillo o instalar un pequeño invernadero si el clima es demasiado severo.
Mantener el suelo húmedo pero bien drenado: Evita el exceso de agua para prevenir la pudrición de las raíces.
Si comienzas a cultivarla ahora, cuando llegue el calor, tendrás un jardín lleno de color y libre de garrapatas de forma completamente natural. ¡No dejes pasar la oportunidad de anticiparte al problema!