Ricardo Arjona protagonizó un momento inesperado y muy divertido: el cantautor guatemalteco interrumpió de sorpresa una reunión de sus ex compañeros de colegio en un bar, desatando la emoción de todos los presentes.
Con su característico humor, Arjona rompió el hielo diciendo: “¡Estamos igualitos, no nos pasó el tiempo!”, frase que despertó risas y complicidad entre quienes compartieron con él aquellos años de adolescencia.
Durante el encuentro, el artista recordó anécdotas y buenos momentos vividos en la escuela, repasando historias que parecían intactas en la memoria de todos. Ricardo Arjona fue uno más de esos niños ya crecidos.
Además, al ver viejas fotografías que circularon en la reunión, Arjona se sorprendió al notar un parecido notable entre su versión juvenil y su hijo, algo que él mismo señaló entre carcajadas.
El reencuentro dejó a la vista el costado más íntimo y sencillo de Ricardo Arjona: el hombre que, más allá de los escenarios y la fama internacional, sigue disfrutando de volver a sus raíces y compartir la esencia de los viejos tiempos con amigos de toda la vida.