Existen estudios que indican que, en ciertas mediciones, viajar puede generar una felicidad más inmediata y constante que la experiencia de la paternidad, que si bien es profundamente gratificante, también está ligada a periodos de estrés y sacrificio. No se trata de decir que una opción es "mejor" que la otra, sino de reconocer que generan tipos de felicidad diferentes y en distintas etapas de la vida. Al final, la fuente de la felicidad es muy personal.
Es crucial ver cómo se mide la "felicidad" en estos estudios. A menudo, se basa en encuestas de autoevaluación, lo cual puede tener sesgos. La felicidad que genera un viaje suele ser más intensa y gratificante a corto plazo, mientras que la felicidad de la paternidad puede ser más profunda, significativa y duradera, aunque con altibajos.
La felicidad es subjetiva y depende en gran medida de las elecciones personales y los valores de cada individuo. Para algunas personas, la realización personal se encuentra en la aventura y la exploración, mientras que para otras, está en la construcción de una familia.
Argumentos a favor de que viajar genera más felicidad (a corto y mediano plazo):
- Anticipación y planificación: Muchos estudios señalan que la felicidad no solo se experimenta durante el viaje en sí, sino también en la fase de planificación y anticipación. La emoción de investigar destinos, reservar boletos y armar el itinerario ya genera dopamina y bienestar.
- Experiencias vs. posesiones: Se argumenta que invertir en experiencias (como viajes) produce una felicidad más duradera y significativa que la compra de bienes materiales. Los recuerdos de los viajes perduran y se enriquecen con el tiempo.
- Novedad y estimulación: Viajar expone a las personas a nuevas culturas, paisajes, sabores y desafíos, lo que estimula el cerebro y genera una sensación de novedad y aventura que contribuye al bienestar.
- Libertad y escape: Los viajes ofrecen una oportunidad para desconectarse de la rutina, el estrés laboral y las responsabilidades diarias, brindando una sensación de libertad y relajación que impacta positivamente en el estado de ánimo.
- Conexión social (en algunos casos): Viajar con amigos, pareja o familia puede fortalecer los lazos y crear recuerdos compartidos, lo que también contribuye a la felicidad.
Fuentes: @mochileros.viajeros
Argumentos sobre la felicidad y la paternidad:
- Propósito y sentido de vida (a largo plazo): Muchos estudios sugieren que, si bien la paternidad puede traer desafíos y una disminución de la felicidad en el corto plazo (especialmente en los primeros años debido al estrés y la falta de sueño), a largo plazo, tener hijos puede proporcionar un profundo sentido de propósito, significado y satisfacción en la vida.
- Amor incondicional y vínculos profundos: La relación con los hijos es una fuente única de amor incondicional y vínculos emocionales profundos que no se comparan con otras experiencias.
- Desafíos y estrés: Es innegable que la crianza de los hijos conlleva un alto nivel de estrés, responsabilidad, sacrificio y, a menudo, una disminución del tiempo libre y la autonomía. Esto puede afectar la felicidad diaria o la satisfacción conyugal en ciertas etapas.
- "Paradoja de la paternidad": Algunos investigadores hablan de la "paradoja de la paternidad", donde los padres pueden experimentar una disminución temporal en su bienestar después de tener un hijo, pero reportan una mayor felicidad general a lo largo de su vida, especialmente a medida que los hijos crecen.
Fuente: @serpadres_es
El nivel de felicidad en la paternidad también puede estar influenciado por factores como el apoyo de la pareja, la situación económica, el acceso a servicios de cuidado infantil, etc. Es muy personal y el concepto de felicidad tan amplio.
Vos que pensas?