Mantener nuestra vajilla en perfectas condiciones puede ser todo un desafío. Las manchas en tazas y objetos de cerámica o porcelana suelen ser difíciles de eliminar, y los productos de limpieza comerciales a menudo contienen químicos agresivos.
Pero no te preocupes, porque hoy te revelamos un truco casero de limpieza que hará que tus tazas brillen como nuevas. ¿El ingrediente mágico? El bicarbonato de sodio.
Paso a paso: cómo limpiar tus tazas
1. Reúne los materiales: Necesitarás bicarbonato de sodio, agua caliente y un cepillo o esponja de platos.
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2. Prepara la mezcla: Coloca dos cucharadas de bicarbonato en la taza a limpiar y añade agua hasta obtener una pasta espesa. Extiende la mezcla por el interior de la taza con el cepillo.
3. Tiempo de reposo: Deja que la mezcla actúe durante 15 a 20 minutos. Esto permitirá que el bicarbonato penetre en las manchas y las disuelva.
4. Enjuaga y seca: Enjuaga la taza con agua caliente y sécala con un paño limpio. ¡Listo! Tus tazas de cerámica o porcelana lucirán como nuevas.
Beneficios del bicarbonato de sodio
- Económico: El bicarbonato es asequible y está al alcance de todos.
- Desinfectante natural: Sus propiedades antibacterianas ayudan a eliminar gérmenes.
- Abrasivo suave: Limpia sin dañar las superficies.
- Amigable con el medio ambiente: Es biodegradable y no tóxico.
Así que ya sabes, ¡devuélvele el brillo a tus tazas con este truco de limpieza casero y económico!