Las velas aromáticas son unos de los utensilios más comunes del hogar. Su uso es decorativo, pero también proporciona beneficios, ya que promueve la relajación y reducción del estrés y mejora el estado de ánimo.
Sin embargo, para obtener esos beneficios hay que utilizar una vela adecuada que no genere daños a la salud. Es decir, existen algunas velas que liberan compuestos de orgánicos volátiles, y contaminan el aire interior.
Por ende, para minimizar los riesgos es importante revisar los componentes de la cera, mecha y las fragancias de este producto. Además, se debe optar por productos naturales, y limitar el tiempo de su uso.
Se recomienda no elegir velas creadas con cera parafina, ya que al quemarse libera compuestos orgánicos volátiles. En cambio, se debe elegir velas creadas por cera de soja, abeja o de vegetales (palma, o girasol).
En relación a la mecha, las de plomo liberan toxinas al quemarse, por ende, la opción son las de algodón. Asimismo, las fragancias no deben ser sintéticas, sino que derivadas de aceites esenciales.
Es importante evitar prender velas durante periodos prolongados y ventilar el ambiente para que los compuestos se disipen. Por otro lado, quienes tengan problemas respiratorios o alergias a las velas aromáticas deben abstenerse de su uso.