¡La educación y el cuidado de tu nuevo amigo son esenciales para una convivencia armoniosa y feliz! Aquí te dejamos algunos consejos infalibles para educar a tu perro y disfrutar al máximo de su compañía.
Lo primero y más importante es poner de previo aviso a todos los integrantes de la casa sobre la llegada del nuevo miembro. Para una mejor convivencia, es fundamental establecer reglas claras sobre los roles de cada uno en el cuidado del perro. Por ejemplo, si come a una hora determinada, ¡es crucial que nadie le dé alimento entre horas para no romper su rutina!
Reglas claras
Los perros necesitan seguir reglas claras y fáciles de entender desde el primer momento. Esto les ayuda a captar la atención y a cumplir con las normas poco a poco. Una regla podría ser no comer en la mesa o no subirse a ciertos lugares como el sillón o la cama. ¡Es esencial que todos en la familia cumplan estas reglas para que el perro las aprenda rápidamente!
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Recompensas
Las recompensas son una herramienta fundamental para adiestrar a un cachorro. La comida puede ser uno de nuestros mayores aliados a la hora de domesticar a un perro, siempre en dosis moderadas o pequeñas. También puedes reforzar su buen comportamiento con juegos, palabras de elogio en un tono de voz agradable o caricias. ¡A los perros les encanta!
No sobrepasar los ejercicios
Es importante tener en cuenta la duración de los juegos o actividades físicas para no cansar a tu mascota. Lo recomendable es crear sesiones de diversión de no más de 15 minutos. ¡Así mantendrás a tu perro feliz y saludable!
Necesidades y horarios
El tema de las necesidades del animal es fundamental para una buena convivencia. Los cachorros menores de tres meses no pueden controlar sus esfínteres, por lo que es importante ser comprensivos y no generar reprimendas muy fuertes.
Dependiendo de la edad, los perros pueden pasar una cierta cantidad de horas sin hacer sus necesidades. Por ejemplo, uno de cinco meses no debería estar en el interior de la casa por más de cinco horas.