Cuando hablamos de jardinería, hay quienes parecen tener un “don natural” y todo lo que plantan florece sin esfuerzo. Pero también están aquellos que, por más que lo intenten, no logran mantener vivas sus plantas, ya sea por exceso o falta de riego.
Afortunadamente, la naturaleza nos ofrece plantas que pueden mantenerse en perfecto estado, incluso, con mínimos cuidados. Hablamos de las suculentas y los cactus, especies conocidas como “todo terreno” que transforman los espacios con su distinguida belleza.
2 cactus y 2 suculentas ideales para principiantes
Cactus Mammillaria Gracilis
Este cactus de tallos cortos y espinosos se destaca por sus flores vibrantes en primavera o verano. Durante la floración, se transforma en un espectáculo visual con colores llamativos. Para cuidarlo, necesita luz solar directa y riego moderado, permitiendo que florezca en todo su esplendor.
Cactus Piedra Lithops
Estos cactus, que parecen piedras por su apariencia única y hendidura central, solo necesitan luz brillante indirecta. Su sorprendente semejanza con las piedras los convierte en piezas decorativas únicas, perfectas para cualquier amante de las plantas o para quienes buscan elementos decorativos inusuales y atractivos.
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Suculenta Echeverría
Conocida como la rosa eterna, esta suculenta es una de las más diversas, ideal para interiores y exteriores. Sus tonos variados, desde el rosa hasta el gris, junto con el verde y el morado, ofrecen una paleta visualmente rica. Requiere luz indirecta, riego moderado en meses fríos, una temperatura mínima de 5 grados y fertilizante mensual en primavera y verano.
Kalanchoe Blossfeldiana
Esta suculenta no cactácea es popular para interiores por sus flores coloridas y decorativas, su crecimiento controlado y su facilidad de cuidado. Para mantenerla saludable, colócala en un lugar bien iluminado pero sin exposición directa al sol, preferiblemente con luz tamizada. Es una opción encantadora para quienes buscan una planta de bajo mantenimiento con un atractivo visual constante.
En definitiva, incorporar estas plantas en tu hogar no solo añade un toque de naturaleza y frescura, sino que también te brinda la oportunidad de darles cuidados mínimos. Estas especies “todo terreno” pueden transformar cualquier rincón de tu casa en un oasis de belleza natural sin complicaciones.