La cúrcuma, también conocida como azafrán de India, es una especia aromática de color amarillo intenso. Su sabor es ligeramente amargo y picante, con un toque terroso y ligeramente dulce.
Este ingrediente versátil puede emplearse de diversas maneras: en infusiones, como condimento o como suplemento. Además, su uso en gastronomía aporta diversos beneficios a la salud, entre ellos: permite el descanso.
Según estudios aquellas personas que padecen insomnio y comienzan a consumir regularmente infusiones con cúrcuma, mejoran significativamente la calidad de sueño y la reducción de la somnolencia diurna.
Esto se debe a que, esta especia aporta cucuminoides y aceite esenciales como el zingibereno que tienen efectos sedantes y relajantes. Además, su vitamina B6 y C, minerales como el magnesio y potasio son esenciales para la función del sistema nervioso.
Eso no es todo, esta infusión tiene componentes antiinflamatorios y antioxidantes que combaten los radicales libres, que son moléculas que contribuyen al estrés oxidativo. Este estrés oxidativo está asociado al insomnio y el retorno de sueño.
Por último, la cúrcuma también permite una mejora de la función cognitiva, es decir, aumenta la memoria y la atención. Se sugiere consumir esta infusión una hora antes de irse a la cama, para así conciliar el sueño con mayor facilidad.