El pie de atleta es una infección fúngica que afecta la piel de los pies y puede afectar a cualquier persona, no solo a los deportistas. Este hongo puede aparecer en el pie o en sus uñas.
Su síntoma en el pie es enrojecimiento del área afectada y en las uñas se detecta porque se vuelven amarillentas y con grietas. Este hongo se desarrolla por varios factores, entre ellos: sudoración excesiva, el uso de calzado ajustado porque retiene la humedad y crea un ambiente propicio para su crecimiento, y las personas con el sistema inmunológico debilitado son propensas a generarlas.
Asimismo, se puede contagiar de una persona a otra, a través de espacios comunes, como la piscina, la ducha donde el hongo puede anidar y transmitirse.
Para prevenir que el pie de atleta se pierda: mantener los pies secos, usar zapatos y calcetines hechos de algodón o lana, cambiar los calcetines con frecuencia, no caminar descalzo en áreas compartidas con otras personas y, usar aerosol antimicótico.
2 opciones de remedios caseros para esta afección son:
Aceite esencial de romero: es rico en timol, que tiene una acción antiséptica que puede eliminar hongos del pie. Por ende, mezcla 10 gotas de este aceite esencial de romero y una cuchara de otro aceite vegetal (oliva o almendra), luego con la ayuda de un algodón añade el líquido en el área afectada y repite 3 veces al día.
Aceite esencial de tomillo: también tiene propiedades antifúngicas, ya que compone timol, pineno y terpineno. El procedimiento es el mismo que el anterior, solo mezcla 20 gotas con aceite de otra esencia y frótalo sobre el sector afectado.
Si los remedios caseros no solucionaron el pie de atleta e incluso, te da fiebre, debes consultar a un médico, quien te dará un tratamiento adecuado en base de medicamentos antimicóticos tópicos, como cremas o lociones.